BETIS (0): Bravo; Bellerín, Pezzella, Edgar, Álex Moreno; Guido Rodríguez, Guardado (Juanmi 63'); Rodri (Tello 63'), Fekir (Joaquín 87'), Canales; y Willian José (W. Carvalho 46').
SEVILLA F.C. (2): Bono; Montiel, Koundé, Diego Carlos, Acuña (Augustinsson 87'); Fernando; Lamela (Papu Gómez 75'), Joan Jordán (Óliver Torres 75'), Rakitic (Delaney 82'), Ocampos; y Rafa Mir (Munir 82').
Árbitro: Mateu Lahoz (valenciano). Expulsó por doble amarilla a Guido Rodríguez (45'). Amonestó a Tello y Diego Carlos.
Gol: 0-1 (55') Acuña; 0-2 (81') Bellerín (p.p.).
50.500 espectadores y muy buen césped y condiciones climáticas.
La valentía y la solidaridad en el fútbol no consisten solo en correr y sudar, sino también en arriesgarte al error con el balón en tus pies por dar ventaja a tus compañeros. Al Betis el faltó anoche esa valentía y lo pagó caro.
El resto de problemas e infortunios de la noche derivaron de ese mal, aunque naturalmente la calidad superior del rival y la expulsión de Guido tuvieran también mucho que ver. Ya durante casi toda la primera parte el Betis fue privado del balón por un Sevilla que practicó en puridad el denostado fútbol de posición, y con él sometió completamente al Betis a través del balón.
Como adelantamos en la previa esa sería la clave del partido, y para (al menos) disputarlo sería necesario tomar ciertos riesgos en la salida del balón. Los jugadores del Betis demostraron desde el primer minuto no estar dispuestos a ello, a lo que había contribuido Pellegrini con la alineación atrás de Pezzella; los continuos pelotazos sin siquiera intentar atraer la presión rival (para al menos dar cierta ventaja de espacio a Bravo y W. José en esa jugada) provocaron que el conocido efecto dominó jugase a favor de los visitantes: el Betis jamás consiguió instalarse en campo rival ni encerrar en jugada alguna al Sevilla, de modo que ni una sola vez logró recuperar el balón en la presión postpérdida; por el contrario, el Sevilla sí arriesgó en la salida, consiguió posesiones largas y encerró al Betis, de modo que tras cada pérdida sevillista el Betis, sin espacios, era presa de una inmediata y feroz presión que permitía recuperar el balón a su rival y empezar de nuevo su ciclo de ataque posicional.
Así transcurrieron los primeros 45 minutos. El Betis, eso sí, defendió francamente bien, con un sacrificado 4-4-2 en bloque medio de líneas juntas que sí cumplió todo lo que le pedíamos en esa previa: trabajo indesmayable, defensa no muy retrasada, laterales rivales bien seguidos y un 3 vs 2 en la salida de balón rival defendido con inteligencia, flotando a Diego Carlos (incapaz de salir en conducción ni una sola vez como hombre libre) y cerrando por contra a Koundé y Fernando. El Sevilla jugaba un megarrondo con la infinita paciencia que deseaba su entrenador, y el Betis aguantaba sin apenas conceder ocasiones, aunque a costa de un desgaste físico importante y con un gris horizonte de partido. Solo Fekir conseguía prolongar a veces las posesiones béticas, mientras el Sevilla, siempre muy bien colocado, exhibía un juego a dos toques tan moderno y académico como romo: la falta de calidad de Jordán y la escasa chispa de los actuales Rakitic y Ocampos metían poco miedo.
Fue entonces cuando Guido, tarjeteado muy pronto, arriesgó más de lo debido y Mateu Lahoz, tan diplomático y remiso otras veces a las expulsiones (inolvidable aquel Keylor Navas vs. Brasanac del Bernabéu) decidió aplicar el reglamento en todo su rigor. El megarrondo fue a partir de entonces un 10 contra 9, con el Betis en un 4-4-1 con un Felir solitario arriba (que siguió tapando bien a Koundé). Naturalmente los espacios fueron apareciendo, especialmente en las bandas, e inevitablemente llegó el 0-1. Después no hubo nada.
Línea por línea
Bravo tuvo nula culpa en los goles y muy pocas opciones de dar ventaja a sus compañeros con los pies. La línea trasera, al completo, estuvo cumplidora en defensa (muy activo Pezzella y bien Bellerín ante Ocampos) pero muy mal con balóne, fase en la que apenas Édgar tomó algún riesgo y Moreno ganó algún metro.
Mal Guido por obvias razones, Guardado tampoco se ofreció nunca en la base de la jugada ni logró girarse más arriba, papel que se le exige. Rodri se vio completamente rebasado en lo físico por un partido que no era para él, y Canales está en un bajísimo estado de forma, al que su entrenador le añade el problema de situarlo en la banda izquierda. Arriba solo Fekir y sus impresionantes condiciones mantuvieron el tipo. Willian José, aislado, trabajó y edescargó algunas jugadas.
De los suplentes cabe anotar el buen trabajo de William Carvalho pese a disfrutar de muy poco balón. Pellegrini sigue sin lograr que su equipo compita ni tenga la más mínima opción de puntuar ante rivales superiores, y, como ya hemos comentado, la razón básica es la dependencia del balón de los suyos y, a la vez, su falta de competencia para sacarlo con fluidez ante rivales que ejercen una buena presión alta. Tiene mucho que ver con ello que casi todos los equipos de cierto nivel se han subido ya al carro del juego de posición, mientras que el Betis se bajó de él hace más de dos años.
El detalle
La mitad de la afición bética se marchó del campo tras el 0-2.
Los comentarios son bienvenidos. En Twitter, @juanramonlara7.
Yo me fui en el descanso. Era imposible que con la nula capacidad de sacar el balón de atrás se fuera a lograr algo. Ayer se equivocó con la alineación. Quizás Victor Ruiz hubiera sacado algo mejor el balón y desde luego el partido de Guido y Guardado fue malo. Canales quizás lo hubiera puesto en la base con Guido para tratar de sacarla y arriba podía haber puesto a Tello, ante la defensa adelantada del Sevilla para buscar el espacio....a ver si para el partido del Barsa o Real se aprende algo, porque sino, son 2 partidos más que se perderán. Eso si, si se gana a los teóricos inferiores (Elche, Levante, Bilbao, quizás empate, Celta) tenemos una media de asegurar de nuevo Europa. Ese es el logro de Pellegrini.
ResponderEliminarPues sí, mientras ganemos siempre a los doce peores...pero para subir un escalón hay que solucionar eso. Si no, el techo está muy claro.
EliminarSaludos!!
JR
¡Muchas gracias por su análisis Juan Ramón! Por circunstancias, llevo varios partidos escuchándolo por radio: ni rastro de sus conceptos.
ResponderEliminar¡Ayer llegaron a decir tras la reanudación que el Betis tenía superioridad en el centro del campo! Y que por ello tenía que ganar la posesión al Sevilla: ¿es esto posible/deseable jugando con uno menos y teniendo por delante 45 minutos?
¡Un saludo!
La "superioridad numernum"en el centro del campo empieza a ser un topicazo más, como el "hay que jugar por las bandas". Si fuera eso y ya todos meterian diez en el mediocampo. O hasta al portero.
EliminarA ver yo si puedo ver los próximos...Gracias siempre!
JR
No voy a hablar del partido que ya pasó, sino de la táctica suprema jugando al espacio y con tiempo, para un nuevo bético en el mundo. Felicidades valiente, eso es bajar el balón al suelo con clase.
ResponderEliminar¡¡¡Muchas gracias!!! Estamos en habitación con vistas a La Meca ;)
Eliminar¡Enhorabuena Juan Ramón! No se crea que va a ser tan fácil como ponerle los partidos en ucraniano, a mí de momento sólo me funciona si pongo en paralelo un capítulo del Inspector Gadget. Luego, con suerte, una vez éste termina, se queda ya hasta el final, lo que es más probable si el Betis acabea pidiendo la hora... Mis mejores augurios
EliminarHola,
ResponderEliminarEstá claro que nos falta un pelín. Pero estar jugando competición europea y estar quinto, de momento está muy bien. Lo comentado alguna que otra vez, daría un pasito de calidad mejorando la salida de balón. Entrenarla y cuidarla un poco. El Derby del otro día me recordó un poco al partido del Eibar del año pasado(mismo resultado por cierto). Demasiado pase en largo del portero, prácticamente única alternativa para llegar arriba. En el segundo tiempo podría estar "justificado" por tener uno menos, pero se veía que ese era plan.
No creo que tenga mucho mejor equipo el Sevilla, al menos el otro día. La diferencia la marcan los centrales y el Fernando, ahí no hay discusión, pero en el resto...Navas no estaba, y Ocampos no era el de hace dos años que daba miedo(por cierto, muy bien parado por Bellerín). Sin embargo, daba la impresión de que el Sevilla era un pelín mejor. La clave como se dice es la táctica. Ahí nos ganaron claramente.
Por cierto, vi algo curioso en el primer tiempo. COmo estaban previsto los pelotazos a WJ, éste se tiraba a la izquierda para intentar emparejarse con el lateral y tener una buena ventaja. Sin embargo, eso no lo permitió el Sevilla, y Koundè se escoraba a su derecha para marcar a nuestro delantero centro.
Esperemos que haya más suerte contra el Elche.
Cuesta leer crónica sobre derbis perdido, pero la del señor Lara, sí se leen con agrado.