BETIS (2): Bravo; Emerson, Bartra, Víctor Ruiz, Miranda; Guido Rodríguez: Joaquín (Lainez 71'), William Carvalho (Rodri 80'), Canales (Guardado 88'), Ruibal (Tello 71'); y Borja Iglesias.
GRANADA (1): Aarón; Foulquier, Germán, Duarte (Víctor Díaz 76'), Quini; Puertas, Yangel Herrera (Yan Eteki 62'), Gonalons, Machís (Nehuén Pérez 76'); Montoro (Vico 12', Jorge Molina 76'); y Luis Suárez.
Goles: 1-0 (39') Borja Iglesias; 1-1 (66') Darwin Machís; 2-1 (88') Borja Iglesias.
Árbitro: César Soto. Amonestó a Montoro, Víctor Ruiz, Puertas, Joaquín, Yan Eteki y Quini.
Diez minutos finales vertiginosos redimieron al Betis de un (hasta entonces) muy mal partido, y le dieron una importantísima victoria.
Minutos 1 al 80
Durante casi todo el encuentro el Betis se vio superado por un Granada mejor en lo físico y en lo táctico. Pellegrini había apostado por una alineación muy técnica introduciendo a Joaquín y William Carvalho, con la que alteró su esquema usual ante la baja de su mediapunta habitual: formó un claro 4-3-3 con Canales y el portugués, ambos a pie natural, como interiores, y Guido siempre en el centro, cerca de los defensas. Frente a ello el Granada plantaba su habitual 4-4-1-1 bien coordinado y presionante, de jugadores rápidos y fuertes pero no exentos de técnica.
Ese planteamiento de su entrenador obligaba al Betis a buscar un fútbol de control de balón sin errores, de altas posesiones y de tratar de instalarse en campo rival. Ganó la posesión, sí, pero casi nunca logró encerrar al Granada en su campo: los visitantes, siempre correosos, lograron mantener una fuerte presión alta que obligó al Betis a jugar el balón muy atrás y a lanzar en largo con demasiada frecuencia. Sin Mandi y sin mecanismos de salida de balón muy estudiados, los béticos trabajosamente llegaban arriba y, cuando lo hacían (generalmente gracias al buen pie en largo de Bravo) pocas veces lo aprovechaban para llegar con velocidad al marco rival. Sin Fekir, poco acertado Emerson, muy marcado (y muy abierto a la izquierda) Canales y lento William, el Betis tampoco mostraba gran profundidad en ataque posicional.
Un salida de balón de escaso criterio: Bravo juega hacia Bartra sin ventaja. La jugada acabará en pérdida de Guido y ocasión clarísima para el Granada.
Enfrente el Granada metía velocidad cuando robaba arriba, y por ese procedimiento lograba meter en apuros al sistema defensivo bético. El Betis aparentaba dominio pero casi nunca llegaba a puerta. El Granada, sí. Sin embargo uno de los pocos ataques rápidos del Betis, naturalmente llevado por Ruibal, se convierte en el 1-0.
Diego Martínez va perdiendo piezas por lesiones sucesivas pero su equipo alcanza un merecido empate mediada la segunda mitad. Pellegrini cambia extremos, sin gran resultado.
Minuto 80 al final
Los diagramas de goles esperados no dan un panorama de merecimientos muy fiable en el corto plazo, pero en ocasiones son tan desequilibrados que sí son significativos. Fue el caso de este partido, que viró radicalmente en el minuto 80: de una inequívica superioridad en tiros a puerta peligrosos del Granada se pasó a una oleada de llegadas béticas (understat.com)
Tal vez la entrada de Rodri por un lentísimo e irrelevante Carvalho no explique totalmente el cambio del partido, aunque sí en gran parte; también debió de contribuir el cansancio de un Granada minado por las bajas, los cambios obligados, la presión a campo abierto durante hora y cuarto y la obligación de ir arriba a por el partido (pues el empate tampoco le servía de gran cosa). Separadas las líneas visitantes, la calidad y la chispa del canterano extremeño conectaron con Lainez y Tello; el Betis cerca a su rival y el gol llega casi por aplastamiento. De ahí al final el Betis maneja el partido con gran solvencia ante un rival sin energía.
Línea por línea
Las paradas decisivas de Bravo mantuvieron en pie al equipo en un día aciago de Emerson y de un Bartra que se apuntó un disparo peligroso y una asistencia... contra su propia portería. Ruiz y Miranda mantuvieron el tipo.
Guido perdió algún balón peligroso pero al menos mantuvo el duelo físico con los granadinistas, algo que no puede decirse de un William Carvalho que, sin continuidad ni la menor actitud, carece del tono físico y el ritmo propios de la categoría. Canales resurgió cuando se atrasó a zonas de mayor influencia.
Joaquín pasó desapercibido. Ruibal dio al equipo una viveza que le es ya imprescindible. Borja Iglesias justificó su caché dentro y fuera del área.
Las apuestas de Pellegrini por William y Joaquin salieron mal: su equipo ya no sabe jugar a ritmos bajos. Pero sus cambios, un magnífico Lainez, un buen Tello y sobre todo el acertadísimo Rodri dieron un vuelco al partido; Guardado dio control final.
Los comentarios son bienvenidos y generalmente contestados. En Twitter, @juanramonlara7.
Fantástica crónica en la que me descubre muchas sorpresas (pues mi impresión era que el Betis dominó ligeramente el partido).
ResponderEliminarEso sí, ya le adelanto que no recuerdo un portero (más allá de el idolatrado Diezma) que me aportara más seguridad que Bravo. Por otro lado, a usted le parecerá exagerado, pero ese zigzagueo de Lainez con balón en que parece andar pisando cucarachas muy distanciadas entre sí a uno y otro lado (disculpe, no sé cómo explicarlo de otro modo), me recuerda a Messi (con menos recorrido).
Cómo siempre, muchas gracias
Lo de Diezma me ha gustado. Portero muy minusvalorado, me parece.
EliminarLainez me parece un jugador, cuanto menos, muy válido en determinadas situaciones.
A ver mañana. ¡Saludos!
JR
Hola.
ResponderEliminarCedo dadivosamente la pole al querido amigo Leopoldo.
Creo que el partido del otro día es un claro ejemplo de cómo estar bien distribuído en el campo(4-3-3 clarísimo que optimiza los espacios) pero con falta de mecanismos que maximicen esa distribución. El dibujo en ocasiones era bonito, pero no había fluidez. Guido de pivote en el centro, le presionaban dos y teníamos lío. De poco sirve estar bien distribuido si luego no se trabaja los moviemientos. Sinceramente confío que esto se pueda mejorar. En el partido contra el Madrid, sí me dio la impresión.
Creo que leí que en defensa también se defendía en 4-3-3 pero he llegado a la conclusión que es lo mismo que decir 4-1-4-1. Esas posiciones obligan a eso. Es curioso el 4-3-3. En ataque se suele convertir en 3-4-3 y en defensa en 4-1-4-1 y se le llama 4-3-3. No obstante, en el segundo tiempo, vi la típica maniobra de dos delanteros(Canales/Panda) contra centrales y medio centro. No sé si fue algo puntual al principio del segundo tiempo o fue la consigna.
Me llamó la atención la forma de defender del Granada. No presionaba muy arriba cuando sacaba el portero. Dejaban que llegase hasta los 3/4 campo bético, y a partir de ahí, cuando los centrales la movían, el bloque nazarí se adelantaba para acortar líneas. Lo observé una vez y me pareció fascinante.
En cuanto al primer gol del Panda. Sin restar mérito a la maniobra del delantero, ¿no está bastante mal defendido? No solo el central que no lo encima convenientemente, es que la ayuda está más pendiente de tapar el centro hacia Joaquín que está en la esquina del área, que de evitar el inminente disparo franco a puerta si es capaz de girar adecuadamente el ariete bético. Es de preparatorio de defensa.
Rodri. Ya comenté hace bastante que tenía buena pista. Y lo decía por lo visto en el filia. Pero es que resulta que ahora, lo veo en el Betis Deportivo, y no me llama la atención, pero con el primer equipo, los ratitos que juega, demuestra que tiene una clase desmesurada. Esperemos que siga evolucionando y se puede convertir en un buen sustituto o complemento de Canales.
Como siempre, agradecirle al señor Lara su crónica. Muy instructiva como siempre.
Están saliendo cosas interesantísimas que no podré contestar antes de esta tarde. Espero que me lo perdonen. Hay mucho muy interesante, por ejemplo cómo el Granada flotaba a Guido desde su 4-4-2 defensivo contra, efectivamente, un 4-3-3 bético muy bien distribuido pero no muy bien ejecutado.
EliminarSaludos a los dos.
JR
Muchos asuntos interesantes, sí:
Eliminar- Los centrales del Granada son tan malos que Vallejo suele ser titular.
- Efectivamente, se dibujó un 4-3-3 muy bonito en salida de balón. Pero el Granada supo bien a quién flotar con su 4-4-2 (a Guido, sobre todo) y el Betis no supo sacar ventajas. Mandi falta mucho (ay, Eibar).
- El 433, en efecto, es 2143 en ataque (tengotun denso artículo sobre ello) y 4141 en defensa. Y los interiores suelen salir al poseedor, provocando un 442... normalmente coyuntural. Aunque pudo ser sistemático.
Gracias!!
JR