miércoles, 18 de noviembre de 2015

Una verdad y varias falacias

Mucho se ha hablado durante las últimas semanas sobre el estilo de juego adecuado a la plantilla 2015-16 del Betis y sobre la necesidad de fichar un extremo zurdo en el mercado de invierno. Trataremos aquí de analizar ambos puntos y responder a las preguntas tras ellos: ¿es el contragolpe el estilo que conviene a la actual plantilla del Betis?, ¿necesita el Betis el fichaje de un extremo?, ¿sería titular?, ¿implicaría ese fichaje un cambio de modelo de juego?

Empecemos por la pregunta de más fácil respuesta: es verdad que la plantilla del Betis necesita un extremo. Vadillo no da el nivel necesario –Mel en todo caso no cuenta con él– y Kadir y Cejudo, además de no darlo, tampoco tienen la características exactas de un extremo, concretamente por falta de velocidad. Mel lleva toda la razón y mucho tiempo reclamando esa velocidad, y aquí se pidió varias veces fichar al menos un jugador que tuviese un perfil intermedio entre los de Joaquín y Rubén Castro: un hombre rápìdo y con gol, que pudiese jugar en banda y en punta. Sin ese perfil, pues Macià trajo en su lugar a Van Wolfswinkel (un jugador mucho menos necesario estando ya Molina y Rennella en la plantilla), una baja de Castro o de Joaquín sería muy grave, y Mel pierde muchas opciones tácticas.

Establecida esa necesidad, veamos qué impacto tendría ese fichaje en el juego del Betis, y en concreto en la alineación y esquema principales que hipotéticamente podría usar Mel, a los que llamaremos el "plan A". Mucha (y muy desordenada) tinta se ha vertido ya sobre ello, y entre ella la del portavoz oficioso de Mel, Javier Mérida, aquí (con bastante tino, dicho sea de paso), y nosotros mismos, este bloguero y los comentaristas, aquí. Pongamos un poco de orden en esas ideas poniéndolas en forma de unos, digamos, postulados, que serán menos obligatorios de cumplir a medida que avancemos en la construcción, siempre, de ese plan A.

1º. Rubén Castro es titular en este Betis. Pocas discusiones caben en este punto.

2º. Rubén Castro debe jugar sin obligaciones defensivas, y con un delantero centro a su lado. Aquí está un centro de las discusiones tácticas sobre este equipo, y para valorarlo hay que atender a las características físicas de Castro: un jugador rápido, muy hábil, inteligente y asociativo en corto, pero sin potencia ni recorrido para la carrera larga, y sin presencia física para proteger balones largos de espaldas a portería. Dada la dependencia del equipo de sus goles y ese recorrido relativamente escaso, parece natural no alejarlo de la portería para hacerlo correr tras un lateral como extremo (sea en un 4-4-2 o un 4-3-3). Por otro lado aislarlo como punta único en un 4-3-3 o 4-2-3-1 traería dos graves consecuencias, ya sobradamente demostradas: (a) el equipo se quedaría sin salida en largo, y (b) se perdería el gol de un Molina o un Van Wolfswinkel, irremplazable por el que aportarían hipotéticamente extremos o mediapuntas: los que hay hoy en el Betis sencillamente no lo tienen. La posibilidad de usar a Joaquín como segunda punta mejoraría poco estas cosas y sacaría de la banda al único jugador específico que tenemos hoy.

3º. El Betis juega con cuatro defensas. No hay ninguna razón para que esto sea obligatoriamente así, más allá de la costumbre de Mel y del fútbol español, pero no parece previsible que esto vaya a cambiar. Sólo hay un esquema defensivo posible que incluya dos delanteros y cuatro defensas: el 4-4-2.

4º. Joaquín, N'Diaye y Ceballos serán titulares. Nuestras afirmaciones se van haciendo más discutibles, pero no parece probable que a largo plazo las alineaciones de Mel prescindan de estos jugadores. En todo caso, para la discusión que sigue, cambiar a N'Diaye por otro mediocentro como Digard, o a Ceballos por Portillo o Van der Vaart alterará poco los argumentos.

Los cuatro puntos arriba vistos dejan UN SOLO puesto libre en la alineación base de este Betis. Para que ese jugador sea el nuevo extremo de este plan A, habría que usar a Ceballos (o, peor aún, a Van der Vaart o Portillo) como mediocentro ofensivo, el cual tendría que defender como pivote en un 4-4-2 con dos extremos: un plan posible como alternativa para ocasiones señaladas, pero que no parece razonable como principal, al menos mientras Ceballos no madure (y mucho) en ese puesto; hemos visto ya ejemplos de ello, como ante el Athletic. Y es que aunque Mel reivindique que los cuatro mediocampistas de sus Betis hayan solido ser un pivote defensivo, otro ofensivo y dos hombres abiertos, conviene recordar que ni fue así las más de las veces (más acudió al falso extremo tipo Salva Sevilla), ni sus mediocampistas ofensivos (Beñat) lo eran tanto como Ceballlos o Portillo, ni cuando se jugó realmente así se alcanzaron siempre buenos resultados (recordemos rendimientos de parejas exteriores como Juanfran-Juan Carlos, de nefasto recuerdo). Por demás jugar con ese 4-4-2 con dos extremos y Ceballos en el centro condenaría al banquillo a la vez a Van der Vaart, Portillo y Petros, y el equipo, sin buenos recambios para Joaquín, Castro ni el nuevo extremo, quedaría obligado a cambiar de plan táctico al menor contratiempo en forma de lesión o sanción.

Mucho más razonable parece jugar con Ceballos (u otro de su corte) en banda y un segundo verdadero mediocentro (sea un Digard o un Petros), o bien al menos, si Ceballos es adaptado a mediocentro ofensivo, taparse un poco por dentro con un falso extremo dando así de paso cancha a Portillo o Van der Vaart. En suma, se fiche extremo o no, el esquema principal debe seguir siendo el 4-4-2 asimétrico, que en ataque se convierte en 4-3-3, como hemos ya explicado aquí muchas veces. Los problemas ofensivos por la banda ciega son perfectamente resolubles con soluciones tácticas (abrir a veces al falso extremo, subidas del lateral, caídas de Castro...) y con el uso de jugadores más potentes físicamente como Vargas y Ceballos. En suma: el fichaje no debería ser titular, y, por tanto, es una falacia (o un mal negocio) pensar que cambiaría por ello el esquema principal de juego del equipo.

Pero queda aún por responder una pregunta más: ¿es el contragolpe el modelo de juego base que conviene a este Betis? Aquí sí hemos de afirmar que, a nuestro modesto entender, Mel yerra de lado a lado. Es comprensible que en este momento quiera estabilizar al equipo desde atrás, o que se tape en según que escenarios y ante qué rivales, pero es evidente (y su propia afirmación de que el equipo carece de velocidad arriba así lo evidencia) que este Betis no tiene hombres para aprovechar grandes distancias y espacios, y sí, por el contrario, buenos jugadores para un juego de posición, posesión y espacios cortos. Los Portillo, Van der Vaart e incluso Ceballos, Castro y Molina no tienen condiciones naturales para contragolpear con cincuenta metros por delante, y sí sin embargo para, si se entrenan bien ciertos conceptos y se colocan adecuadamente las piezas, sacar bien el balón desde atrás, alargar las posesiones y contrapresionar bien, y, en suma, encerrar al rival y encontrar fisuras en sus defensas. Si esto no se ha hecho bien tras los primeros partidos (en que sí se hizo) no hay que buscar las causas en las condiciones de los jugadores.

Peor aún: tratar de jugar un sistema contragolpeador obligará a sacar del campo a los jugones del equipo para hacer sitio a dos extremos más o menos potentes (do momento, obligatoriamente siempre Cejudo y Joaquín, sin suplentes válidos para refrescarse ni en caso de lesión), y eso forzará a dejar en el banquillo o la grada a, al menos, cinco hombres de la siguiente lista: Ceballos, Van der Vaart, Portillo, Molina, Van Wolfswinkel y Rennella. O sea, quedará una sola plaza libre para todos los mediapuntas y tanques de la plantilla, que no son pocos ni todos malos.

Capítulo aparte a este respecto merece el caso Petros, jugador extrañamente catalogado por Mel y la prensa como mediocentro defensivo, tal vez porque corre mucho, y que sin embargo ha demostrado tanta incapacidad para mantener la posición defensiva (defecto tan brasileño como, esperemos, corregible) como capacidad para el juego de posesión y presión inmediata tras pérdida, algo ideal junto a un Digard o un N'Diaye para plantar al equipo en campo contrario. Las pérdidas de balón del brasileño sólo existen en la imaginación de la prensa sevillana: las estadísticas lo colocan como uno de los mejores pasadores del equipo, algo estimable para un jugador que ataca en posiciones de interior avanzado.

En resumen, a nuestro parecer Mel se equivoca al pensar que su plantilla es contragolpeadora por naturaleza, y no lo es justamente por la carencia de extremos rápidos que él mismo, ahí con razón, ha denunciado. Para convertirla en una plantilla contragolpeadora tendría que fichar a dos o tres jugadores más (¡y no se han fichado pocos ya!) y prescindir de varios de calidad contrastada, algo que no parece tener sentido ninguno. Digamos, por cierto, que las estadísticas repetidamente argüidas (ese "casi cien por cien" de goles conseguidos "a la contra") no son ciertas, por decirlo suavemente: de los 11 goles logrados 3 lo fueron en ataque posicional, 3 a balón parado y 5 al contragolpe, y casi todos estos en situaciones de presión alta, no con el equipo replegado.

En suma, creemos que hay mimbres para jugar bien al fútbol si se trabaja correctamente el ataque estático y la últimamente velazqueña salida de balón –algo en todo caso insoslayable, pues será necesario para marcadores en contra–. Y pensamos que el Betis puede construir una alineación equilibrada entre defensa y ataque, seguramente con dos mediocentros salidos de la terna N'Diaye-Digard-Petros, más un falso extremo, Joaquín, Castro y un tanque. Haber hecho mal ciertas cosas o victorias afortunadas no debe cegarnos.

Como siempre, los comentarios serán bienvenidos. Este blog no será puesto al día con regularidad tras los partidos las próximas semanas.

En Twitter: @juanramonlara7 

9 comentarios:

  1. La encrucijada se sitúa, más que la hipótiesis de jugar con dos extremos abiertos cuyas principales características serían la velocidad y el desborde, en la afirmación de que Castro debe jugar acompañado por un tanque.

    A estas alturas intuyo que entre los periodistas y los aficionados ya es mayoritaria la corriente que piensa que debe jugar acompañado por un mediapunta(V. der Vaart/Portilo), independientemente de que en la izquierda juegue un falso o verdadero extremo, y lo razonan con estas afirmaciones:
    1- Molina y V. Wolfwinskel llevan cero goles, y pocos confían en que sean capaces de arreglar con el tiempo sus números. Se cree que Molina ya no da el nivel para primera.
    2- V. der Vaart y Portillo "tienen mucha calidad", no se pueden desaprovechar ambos en el banquillo. No pueden jugar en banda porque con su calidad tienen que estar lo más cerca posible de la portería contraria, son los candidatos a acompañar a Castro. En mi opinión en el caso del holandés podría llegar a valer porque seguro que no es mal rematador, pero Portillo directamente es que huye de las zonas de peligro.
    3- En el fondo se sigue pensando, además es lo que gusta, que con Castro, Joaquín, V. der Vaart, Ceballos, Piccini, Vargas,... lo normal es hacer juego de posesión, así que la salida en largo sería un recurso muy ocasional. Ese aspecto del juego sería sacrificable.

    Yo tengo dudas de que esta plantilla tenga la calidad suficiente para jugar a la presión alta, posesión dominante y defensa abierta pero prefiero jugar con tanque, y trabajar las horas que haga falta la salida de balón, el reparto de espacios y las jugadas a balón parado en ataque y, sobre todo, en defensa. Ahora bien el míster es más de pádel...

    P.D. Sr. Lara, ¿ha pensado que le lean los profesionales del club? Yo lo veo cada vez más probable, ocasionalmente se ven coincidencias. Eso sí que sería un verdadero integrante del 'entorno'... Jejeje

    Saludos a todos.

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  2. Jeje... No sé si me leen, la verdad. A veces me lo parece, otras veo cosas que me hacen descartar por completo la idea. Chi lo sá.

    A mí la idea de jugar un 4-2-3-1 como sistema principal me aterroriza. No quiero recordar la última vez que Mel lo hizo, y con jugadores del mismo corte: un mediapunta muy centrocampista y dos extremos sin gol. Con un MP así y un par de pabones, como ha hecho temporadas atras el Espaynol, puede funcionar. Con Joaquin y Cejudo es ir de cabeza al precipicio.

    En cuanto al tanque y la salida en largo, creo que esa alternativa es deseable aunque quieras jugar al tiquitaca. Ahi está Suárez. Si te presionan muy arriba, y recuerdo el Betis al Sevilla el dia del 3-3, un Negredo te rompe esa presion. Un Castro, no. Como en baloncesto: sin pivits la defensa,se te abre y tampoco hay triples. A mon avis;)

    Saludos, P.V.

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  3. Muy buen análisis y muy explicado todo pero para que después Mel meta el trivote Digard-Xavi-N'Diaye que parece que está probando para el encuentro contra el At. de Madrid. ;)
    http://elcorreoweb.es/deportes-betis/mel-ensaya-con-un-trivote-para-frenar-al-atletico-DJ1038050

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    1. para mi es otra variante del "Plan A" de Mel ("A" de "A ver si la coge Rubén Castro y suena otra vez la flauta")

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  4. Madre mía, el bus de las siete, qué cosa. No se entiende muy bien pasar de un mediocentro con el Ath. a tres con el At. No parece muy serio esto. Enfins.... Saludos

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  5. Por cierto, para hacer esa cosa más valdría Petros y dos por detrás q esto. Pero se trata, no lo duden, de premiar a X.Torres.
    JR

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  6. Si tras el día el ascenso con el Alcorcón, hubieramos invernado y volvemos ayer y vemos en el campo de titular a Xavi Torres y Cejudo ( no le niego su voluntad y sacrificio ) y en la banda calentando a Jordi Figueras hubieramos pensado que es un mal sueño. Desgraciadamente es verdad. Afortunadamente con milagro ó sin él, estamos 5 puntos por encima del descenso. Faltó sentido común en la Dirección Deportiva ( que sobre un 9 en la plantilla y falte un futbolista dinámico y con velocidad zurdo no tiene perdón de Dios ), falta sentido común en el entrenador, y falta sentido común en la grada ( torpeza absoluta pitar a un jugador nuestro de forma tan ostensible pase lo que pase ).

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  7. Pues lleva Vd. toda la razón. Sorprendentemente, dadas las circunstancias, pude ver ayer el partido, Trataré de escribir entre hoy y manhana. Un saludo, P.

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  8. Buenas tardes JR y demás foreros, antes que nada agrader como siempre el blog (lo leo siempre y escribo muy poco).
    Casi de acuerdo con todo lo que escribes, pero unicamente dejadme comentar mis impresiones sobre los "refuerzos" de la plantilla aún con la sangre caliente por el partidito de ayer (Mel tiene también lo suyo, pero esa parte irá en el análisis del partido...), para valorar lo que tenemos en un año que me temo (otra vez) complicado:

    Westermann: Una especie de Antonio Amaya más viejo, si juega arropadito se tapa bien, si juega adelantado se las come.

    Pezzella: Una especie de José Antonio Caro, pero en argentino y mucho más “caro”, comparte con Westermann que si juega adelantado se las come, con la diferencia que si juega arropadito también se las come…

    Vargas: Titular indiscutible en este Betis pese a su edad, si jugara dos partidos seguidos sería una maravilla, pero como eso es físicamente imposible ha terminado siendo titular el TERCER lateral zurdo del equipo de segunda.

    Didgar: En lo técnico y en lo táctico debería ser una versión mejorada de X. Torres (y sin dejarse sobornar “presuntamente”, lo que supone una gran ventaja competitiva). Pero físicamente es una versión empeorada del central Mario (juega medio tiempo: se lesiona 3 partidos…). Hasta que no haya nuevas noticias está descartado para el deporte de alta competición.

    Petros: Una especie de Cañas (sobrino) pero de Brasil, parece honrado y físicamente apto, lo que en un equipo serio con su calidad únicamente debería bastarle para jugar algunos minutos en las segundas partes. En este Betis debería ser titular.

    Ricky Van Wolfswinkel: Mejor que Braian, peor que Rennella. En el equipo de segunda del año pasado habría sido el cuarto delantero, sustituyendo al sustituto de Jorge Molina. En la Ponferradina sería una estrella.

    Joaquín: Al ritmo que lleva se lesionará pronto: Ataca, defiende y tira del equipo hasta que no puede más físicamente. Con RC24, Adán y algunas pinceladas mas (NDiaye, Ceballos?) son el sostén del equipo.

    Var der Vaart: Os juro que se me había olvidado incluirlo (me he acordado al repasar lo escrito). Una versión empeorada del peor Verdú, es decir, aportando lo mismo pero jugando menos minutos.

    Tarek: ¿?........

    Abrazos verdiblancos desde los Bermejales
    Pedro

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