Continuemos nuestro balance con la línea defensiva:
Nélson
Se hizo con un puesto de titular en la segunda mitad de la temporada, una vez superada su importante lesión de tobillo –parece que casi completamente, aunque aún tuvo algún problema para jugar varios partidos muy seguidos–. De los ¡tres! laterales derechos de la plantilla, es sin duda el que tiene mejores condiciones técnicas y físicas para el puesto: tiene buen control y pase, es rápido, y tiene resistencia para recorrer toda su banda, lo que utilizó Mel con frecuencia para ponerle delante un falso extremo, y en general para liberar su empuje ofensivo. A cambio, sigue sin aprovechar al máximo esas virtudes, en ataque por su mala elección de jugada (casi nunca ha acabado una suya en gol), y en defensa por sus errores tácticos; en este aspecto ha mejorado un poco, pero no lo suficiente. Rendiría muy bien como carrilero en una defensa de cinco, pero para su desgracia ese sistema no se usa casi nunca en el fútbol de hoy.
Estamos ante un caso de difícil decisión: lo ideal sería traer un lateral más completo, y en ese supuesto un jugador como Nélson no daría el perfil de suplente y debería salir del club. De lo que hay ahora, sin embargo, es lo mejor.
Chica
Contra la opinión –sostenida a veces por uno mismo– de que para ser lateral de élite hace falta poco más que conocer bien los rudimentos del puesto, el caso de Chica demuestra que eso a veces no es suficiente. Tácticamente es correcto en defensa, aunque fue criticado por bascular (¡bien!) en balones cruzados que acabaron en gol. Su excesiva lentitud, retratada cruelmente en partidos como el de San Mamés, le ha hecho pasar apuros defensivos; su físico y técnica no son más que correctos para la ofensiva, por lo que su aportación en ese aspecto es escasa. En resumen, aporta muy poco más de lo que ya había en la casa, y eso no justifica un fichaje, con o sin carta de libertad. Por tanto debería buscársele salida, aunque su contrato y su aparente buena adaptación al club lo convertirán probablemente en un aceptable fondo de armario (sólo) para su puesto.
Isidoro
Algo menos lento que Chica y algo peor que él técnicamente, tuvo sus minutos y demostró, un año más, el absurdo de traer de fuera jugadores para su puesto que apenas lo mejoran, si es que lo hacen, como los Chica, Damià y tantos otros. Suplente perfecto por honradez, identificación con el club, no ser causa jamás de problemas y haber dado siempre sus mejores prestaciones (por más que esto no sea decir demasiado), debería permanecer en la plantilla, pero desgraciadamente no será así.
Mario
Central chocador e intimidador, rápido, ágil y de aceptable cabeceo y manejo de balón, fue el mejor defensa del equipo en la primera vuelta. Sus condiciones son pefectas para el juego de presión adelantada que propuso Mel en esa fase de la temporada, que exige rapidez por dejar muchos metros a la espalda de los centrales; su juego es de marcador antiguo, siempre más atento a la anticipación que a guardar la posición, lo que le hace complementarse bien con Dorado (diestro y zurdo respectivamente, además).
Sus dos grandes problemas son bien conocidos: su juego agresivo (aunque noble: se juega su físico tanto o más que el del delantero) lo coloca siempre al borde de la expulsión; y tiene una gran tendencia a lesionarse. Por una u otra cosa suele estar disponible para poco más que la mitad de los partidos, pero en estos su rendimiento podría ser muy bueno si controlase las tarjetas. Tras consulta con el área médica del club, si ésta lo considera apto debería seguir en la plantilla: eso parece que ocurrirá tras haber sido dado por descartado en los medios informativos, para sorpresa de quien esto firma, hace pocas semanas.
Paulão
Agradabilísima sorpresa del mercado invernal, ha sido decisivo para la permanencia del equipo en Primera. De presencia física imponente, domina completamente el juego aéreo (cosa que podría usar mejor, aun a costa de perder momentáneamente el sitio, para barrer los saques largos rivales a la zona de mediapuntas). Es muy completo: cubre mucho campo, mide bien sus salidas a la anticipación, no pierde la posición correcta casi nunca, saca el balón con mucha calma e inteligencia, tiene una aceptable velocidad y hace pocas faltas. En la lucha física cuerpo a cuerpo es prácticamente insuperable, incluso para tanques de prestigio. Como único posible defecto, pareció bajar bastante su rendimiento en los pocos partidos en los que su concentración no fue máxima. Cedido la temporada pasada (¿qué problema tendrá en el Saint-Étienne?), hay que intentar que siga, por todos los medios.
Dorado
Ha superado con un aprobado alto su muy tardía promoción a Primera División. Penalizado en ciertos partidos de la primera vuelta por el sistema de juego, que ponía en evidencia su lentitud, mantuvo una línea regular de juego como titular mientras veía desfilar a cinco jugadores como su pareja en la zona central. Favorecido por ser el único zurdo en su puesto, lo que facilita la salida de balón del equipo con tres al fondo, mostró sus virtudes conocidas de la temporada pasada (fiabilidad, buena colocación, sentido del corte, pocas pérdidas en zonas pelogrosas) y tapó peor que en Segunda sus carencias (falta de velocidad, abuso del pelotazo). Seguirá, por méritos propios.
Amaya
No mejoró a ninguno de los centrales anteriores pero tampoco desentonó cuando se tuvo que echar mano de él; incluso hizo algunos partidos brillantes cuando el equipo jugó muy metido atrás (Manzanares, Málaga), lo que favorece sus condiciones como central muy alto (el juego aéreo, sobre todo) y oculta sus carencias a campo abierto lejos del área. Entre sus virtudes cabe citar también su sentido para tapar tiros en jugadas al límite. Si no se trae a nadie que lo vaya a mejorar claramente, es un aceptable relleno de plantilla, y puede seguir.
Ustaritz
Traído como segundo suplente para emergencias, al final no fue ni eso y hasta Cañas lo adelantó como central en las preferencias de Mel. No superó las sospechas que persiguen su rendimiento desde Bilbao, y además apareció en escena en los peores momentos y sin resultado. Cedido, naturalmente se marchará.
Nacho
Era uno de los pocos hombres de la plantilla con larga experiencia en Primera y ha confirmado su plena validez para ella. Adaptado ya perfectamente al puesto de lateral izquierdo (que parece haber desempeñado toda su vida), ha sido el hombre de rendimiento más regular del equipo, siempre entre el 5 y el 8 sobre 10. Tapa su zona con mucho oficio, maneja bien el balón, tiene un criterio excelente para elegir jugada (algo muy importante en su puesto, clave para salir de una presión adelantada) y su despliegue físico nunca es espectacular pero sí mayor del que aparenta, en potencia y recorrido. Por supuesto continuará: por suerte no es el tipo de jugador en el que se fijan clubes de más postín.
Álex Martínez
Ha dejado buenas sensaciones en sus escasísimas apariciones como alternativa a Nacho (parece rápido y de buena técnica), pero el muy regular rendimiento del titular no le ha permitido disfrutar de minutos. A punto de cumplir veintiún años, su buen cartel promete una proyección que no ha podido mostrar; si, en circunstancias como las de este año, Mel piensa mantener siempre a Nacho (cosa razonable), habría que buscarle una buena cesión en Segunda División o en un Primera que le asegure minutos.
Los objetivos de la planificación en esta parcela deberían ser pues, desde nuestro punto de vista:
- Traer un lateral derecho que mejore a Nélson y Chica, y deshacerse de ambos: se echa de menos la pareja Lopes-Isidoro.
- Lograr el traspaso definitivo de Paulão. Con este, los dos puestos de central quedarían aceptablemente cubiertos, si bien a medio plazo convendría pensar en la venida de un central zurdo que mejore sustancialmente a Dorado.
- Decidir el futuro de Álex Martínez: minutos o cesión. En este segundo caso, y salvo que el filial guarde otro hombre de nivel, convendría hacerse a su vez con la cesión de un lateral barato y fiable que compita con Nacho o al menos pueda cubrir sus ausencias.
Realmente la defensa a sido una linea muy señalada este año y es que realmente no tiene mucho nivel, sin duda es fácilmente mejorable.
ResponderEliminarEn mi opinión Chica, Amaya y Ustariz han sido unas incorporaciones absolutamente prescindibles, no han aportado nada que no hubiera ya en la casa.
Tengo la impresión de que no va a haber ofertas por Nelson así que él y Chica serán la pareja de laterales derechos. Por la izquierda yo buscaría un lateral que viniera para titular porque creo que la condición física de Nacho, por su edad, va a ir a menos y va a tener más problemas con la velocidad de los rivales.
Y de los centrales siento ser crítico pero solo Paulao me ha demostrado ser central fiable para 35 partidos en primera: Amaya solo tiene juego aéreo, Dorado colocación y que no va al suelo y Mario nada más que la agresividad. Hay que traer otro central que los mejore, sin el que yo no vería posible apostar por el plan A.
En términos estrictamente futbolísticos, he echado mucho de menos este año a Lopes y Miki Roqué.
Palmeraverde.
Tal vez hoy esté yo benévolo... El fichaje de Amaya no lo he visto tan mal: ¿qué había mejor?
ResponderEliminarEn efecto, lo de Miki y Lopes, cada una en su medida, son dos pérdidas futbolísticas grandes, un poco absurda la segunda. Esta línea muchos están, como en la portería, en ese difícil límite del aprobado. Si queremos dar un salto de calidad hacen falta cosas en los tres puestos, sí, pero estamos para pocos trotes y el lateral derecho me parece lo más urgente (y difícil). En el izquierdo vendría bien un joven con proyección, pero, ¿no lo tenemos ya? Papeletas para Stosic.