CELTA (1): Rubén; Kevin Vázquez (Hugo Mallo, m. 61), Murillo, Araújo, Olaza; Okay; Fran Beltrán (Bradaric, m. 77), Rafinha; Iago Aspas (Toro Fernández, m. 77), Smolov (Brais Méndez, m. 53) y Nolito (Santi Mina, m. 77).
BETIS (1): Joel; Emerson, Mandi, Feddal, Álex Moreno (Pedraza, m. 53); Guido Rodríguez, Guardado; Aleñá (Joaquín, m. 57), Canales, Juanmi (Tello, m. 57); y Loren (Borja, m. 91).
Goles: 1-0, m. 22: Nolito. 1-1, m. 79: Feddal.
Árbitro: González Fuertes (Comité Asturiano). Fuertemente casero. Amonestó a Álex Moreno, Mandi, Kevin Vázquez, Iago Aspas, Tello, Canales, Araújo, Okay y Bradaric.
El más que aceptable partido jugado por el Betis en Vigo lo hizo merecedor de la victoria y sobradamente del empate final, basado en dos mejoras respecto a encuentros anteriores: una psicológica y una táctica.
Hablar de la psicológica no es el objeto de este blog, pero lo cierto es que el tono moral del equipo subió notablemente; no sin despistes (indefendible Joel en el 0-1), pero sin duda la activación del equipo y sus ganas de ganar se notaron en detalles como los balones divididos hacia el final del partido, y ello ante un Celta que está aún metido en la lucha contra el descenso.
Más nos interesa hablar del asunto táctico, que tiene que ver mucho con la baja del jugador más brillante de la plantilla, Nabil Fekir. El francés tiene sin duda un talento técnico y físico extraordinario (explosivo y no exento de resistencia: aguanta muy bien los partidos completos), que le permite decidir partidos en jugadas individuales. No dudamos por demás de su fortaleza psicológica e implicación. Sin embargo carece casi por completo de concepción colectiva del juego, lo que provoca problemas tácticos al equipo en ataque y en defensa.
Sobre el primero de ellos, el defensivo, advertíamos
antes del partido. Al ser Fekir un jugador el que es muy difícil asignar un rol defensivo en el equipo (más por caótico que por poco trabajador), y contando con que pocos entrenadores renuncian a un punta nato que baje balones (ayer el propio Celta exiliaba a Aspas a una banda de su 4-3-3 para hacer sitio a Smolov, como hacía Poyet con Rubén Castro), el Betis se ve obligado –con Fekir en el campo– a defender con dos puntas arriba, que dimiten de la jugada cuando esta les rebasa. Dado que casi todos los equipos sacan el balón con dos centrales atrás, con los que quedan emparejados Fekir y Loren/Borja, y que conviene dejar un hombre de más en zona trasera para evitar el mano a mano en todo el campo, el Betis queda casi siempre en inferioridad numérica en el centro del campo (juegue con el esquema que juegue), resultando un sistema defensivo débil y poroso. Defendiendo por ejemplo en 4-4-2:
Inferioridad numérica en mediocampo
Ayer, a pesar de jugar justamente un 4-4-2 defensivo, los inteligentes movimientos de Loren y el segundo delantero, Canales, cerrando líneas de pase y basculando, permitieron impedir casi siempre que la pelota llegara limpia al mediocentro, que quedaba bien cerrado habitualmente por Canales. Por ejemplo con balón en pies del central derecho celtista el equipo defendía así:
Esa sutileza, para la que se necesita inteligencia y concentración defensiva del segundo punta, permitió al Betis defender con mucha más consistencia. Ante el 4-3-3 local el Betis lo hacía con parejas claras y persecuciones casi al hombre en el resto del campo, más los dos centrales sobre Smolov. En ataque el Betis quedaba en 4-2-3-1, con Guido más centrado que Guardado, y Aleñá y Canales en constante intercambio de posiciones entre el extremo derecho y la zona del mediapunta.
Quedan por comentar los problemas tácticos que (aunque parezca algo disparatado decir esto) provoca Fekir en ataque, resumidos en los movimientos de Emerson
en este vídeo (a partir de 1:40) para intentar infructuosamente ofrecerse en la jugada, o en este gesto de Joaquín (segunda imagen abajo) cuando Fekir dispara en Mallorca en lugar de pasarle el balón a él, en muchísima mejor posición:
Los brazos abiertos de Joaquín se convirtieron en celebración de gol, y la jugada del Villarreal en la ocasión más clara del partido. Aun así, pese a su exagerada calidad individual, el equipo tiene mejores resultados cuando Fekir no juega: tres victorias, dos empates y una sola derrota, con partidos tan vistosos en ataque como los de Athletic (3-2) o Real Sociedad (3-0). No pretendemos extrapolar desde tan pocos partidos, pero es evidente que no puede calificarse a Fekir de jugador decisivo, ni su baja es un dolor de cabeza para su entrenador. Naturalmente un técnico que hubiese fijado su rol en el que debía, de extremo derecho metido por dentro con más rigor posicional y comprometido en defensa, habría sacado del francés el potencial extraordinario que tiene; no lo logró Rubi.
Segunda parte
Sin Fekir pero con solidez y a partir de un juego muy mainstream el Betis fue superior en la segunda parte a un Celta que casi no salió de su campo, y que no provocó el menor peligro. Los cambios mejoraron a un Betis sin profundidad por dentro pero con cierto peligro por bandas, y por insistencia llegaron las jugadas que debieron dar la vuelta al partido si González Fuertes y su extraño VAR no hubiesen hurtado la victoria a los béticos.
Línea por línea
En lo individual cabe destacar la inaceptable desconcentración de Joel, que falla tres veces en el 1-0 (con los pies, al colcoar la barrera y al reaccionar), y la hiperactividad de Emerson. Guido y Guardado dieron mucha solidez al mediocentro, y Aleñá apareció muy poco, como Juanmi (da muy poco en ataque fuera del área, aunque trabaja) y Loren, trabajadores sin embargo.
El detalle
El gol del Betis llegó en nuestra jugada preparada favorita para los córneres, mil veces explicada aquí, implantada ya en las dos temporadas anteriores y como siempre realizada por Joaquín (a veces con Guardado, esta vez con Canales):
- Zurdo y diestro se perfilan ambos para sacar el córner.
- Si acuden dos defensas, balón directo al área, y se ha logrado extraer a dos defensas de ella al precio de un delantero.
- Si solo viene un defensor, como fue el caso, el colocado para sacar a pie cambiado toca en corto a su compañero y se cruza por detrás de este para ofrecerse, montando un dos contra uno. En este caso, Canales saca y se cruza por detrás de Joaquín:
Para evitar el dos contra uno el marcador de Emerson se acercó a Canales y obligó a salir a por Emerson a otro defensor. Despoblada así el área de defensas y casi en igualdad numérica los béticos en zona de remate, Feddal quedó desmarcado para el gol (casi fuera de plano, a la izquierda):
El Betis es el equipo que más partido ha sacado este año al balón parado.