OSASUNA (1): Nauzet; Oier, David García, Miguel Flaño, Unai, Berenguer (Jaime Romero, m. 68); Roberto Torres, Digard, De las Cuevas; Sergio León (Fausto Tienza, m. 87) y Oriol Riera (Rivière, m. 57).
BETIS (2): Adán; Piccini, Pezzella, Mandi, Álex Martínez; Cejudo, Jonas (Brasanac, m. 63), Petros, Felipe Gutiérrez; Joaquín (Álex Alegría, m. 83) y Sanabria (Rubén Castro, m. 83)
0-1, m. 19: Joaquín. 1-1, m. 47: Roberto Torres. 1-2, m. 91: Felipe Gutiérrez.
Del Cerro Grande (Comité Madrileño). Amarillas a David García, De las Cuevas, Brasanac y Cejudo. Expulsó por roja directa a Rivière (min. 86).
El Betis de Poyet parece haber definido definitivamente su estilo: un juego basado en el dinamismo –si quieren mirar la botella medio llena–, o un juego descontrolado –si prefieren verla medio vacía–, de campo largo, presión constante e irreflexiva al rival cuando este tiene el balón, y mucha movilidad en ataque, fase en la que es difícil detectar movimientos o mecanismos reconocibles. En suma, una versión algo más cuidadosa con la pelota del viejo y obsoleto estilo inglés, ofensivo pero muy diferente del fútbol posicional hoy de moda. Números en mano, parece que alcanzará para disputar el partido a la mayoría de equipos de la liga española y vencer a un buen puñado de ellos, y también para hacer algunos ridículos apenas esa presión falle –por falta de intensidad o por la calidad del rival–. En el criterio de cada cual quede si el rendimiento de este equipo está por encima o por debajo –como creemos nosotros– del potencial de esta plantilla.
Primera media hora
Se anunciaban cambios en el Betis y desde luego los hubo: para estupefacción general Poyet decide prescindir del mejor jugador del club durante las seis últimas temporadas, Rubén Castro, y para sorpresa de quien esto escribe no lo hace para plantar su favorito 4-3-3 (en el que el canario es un cuerpo extraño) sino para colocar al equipo en un 4-4-1-1 (o 4-2-3-1 si lo prefieren) en el que Jonas y Petros hacían de mediocentros paralelos, Cejudo y Felipe Gutiérrez cogían las bandas y Joaquín quedaba, con absoluta libertad de movimientos, por detrás del punta, que era Sanabria en lugar de Alegría. Parece pues definitivamente que Poyet desea jugar con un solo punta nato, sea con un esquema o con otro, y que ese punta ha de ser para él un hombre potente físicamente para bajar balones, papel que ciertamente no puede cumplir Rubén. Bien podría Poyet entregar al canario el privilegiado puesto de segundo punta, a la manera de Joaquín ayer (aunque su aportación al juego interior sería obviamente distinta), o usar alguna de las fórmulas aquí veinte veces explicadas, pero no parece entrar en sus planes tal cosa: Rubén no corre lo suficiente, y además Poyet parece pensar que tener a tres por dentro en el mediocampo es imprescindible, incluso más que meter goles.
Menos problemas tuvo Quique Martín para jugar con dos arriba, aunque no tengan sus delanteros exactamente la calidad de Castro. Osasuna colocó un 5-3-2 de interiores bastante abiertos (De las Cuevas y Torres) por delante del mediocentro exbético Digard, saliente como siempre de lesión. Los sistemas encajaban mal, así que durante el partido nunca hubo emparejamientos claros y además los intentos de presión de unos y otros fueron siempre impulsivos y poco ordenados. De hecho tardaron los locales bastante en ajustar mínimamente su presión, lo que permitió tocar por dentro a un Betis a cuya salida de balón hace mucho bien la presencia de Mandi y Jonas, y que trataba de sacar el balón jugado. Los visitantes dominaban claramente la posesión pero apenas tenían más ocasiones que el gol de Joaquín.
Segunda media hora
Una buena jugada personal del excanterano bético Sergio León da el toque de corneta a Osasuna –un equipo muy corto de calidad: mantiene la base del equipo sexto el año pasado en Segunda, y su único fichaje no gratuito ha sido precisamente León–; los pamploneses dan a la media hora un paso adelante con su presión y el Betis, con un Jonas enredado, comete pérdidas en zonas prohibidas. A costa de un notable desgaste físico los locales acumulan ocasiones, especialmente en el desconcentrado arranque bético de la segunda parte. Llega el empate y puede caer algún gol más.
Última media hora
Afortunadamente para el Betis Quique Martín retira a Berenguer, martirio de Piccini desde el carril, y cambia a un 4-2-3-1 en el que De las Cuevas se coloca como mediocentro a la derecha de un Digard que ya sólo mira cómo pasan los rivales. La presión osasunista en el medio baja una barbaridad, el Betis (ya con Brasanac ahí) la toca con comodidad y, aun sin hacer un juego ni mucho menos vistoso, las ocasiones claras béticas van goteando. Poyet cambia a los dos de arriba y el Betis queda con un jugador más muy al final. El gol, justo, llega sobre la bocina.
Jugador por jugador
Adán: Mal en el gol de Osasuna y con los pies. Seguro por demás.
Piccini: La jugada del 1-1 lo deja en muy mal lugar: con el apoyo de dos compañeros por dentro permite al rival desbordarlo por fuera, algo muy poco inteligente.
Mandi: No se impone por físico, pero maneja bien el balón y el tiempo.
Pezzella: Cumplidor, como siempre.
Álex Martínez: Asegura un rendimiento aceptable y sabe cerrar, pero sus condiciones son inferiores a las de Durmisi.
Cejudo: Cuando las cosas se ponen feas los entrenadores acuden a él. Por algo será.
Jonas: Irregular. Pasa bien pero se dejó robar balones peligrosos.
Petros: Partido monumental. Omnipresente y acertado en el pase como siempre, fue el único que puso un poco de pausa racional en el precipitado juego bético, e incluso se permitió el lujo de dar un par de asistencias, como la del 0-1. En el doble pivote está más a gusto que como único mediocentro, porque tiene un rango más amplio de movimientos.
Felipe Gutiérrez: Carece de condiciones físicas (en concreto, de velocidad) para jugar realmente en banda como ayer. Fue decisivo en dos jugadas: una parada bajo palos –gracias a un movimiento previo excelente– y el gol final, de tiro muy potente que el portero se traga de forma infame.
Joaquín: La posición de segundo delantero, una bicoca para un jugador de calidad –exige poco en defensa y da mucha libertad en ataque–, se justifica si creas superioridades en zonas de mediapunta pero también llegas arriba al remate. Así fue. Desde ese lugar, más apropiado ya para él que el extremo –los años dan sabiduría y quitan velocidad–, fue gran protagonista de los ataques béticos.
Sanabria: De momento da mejores sensaciones que resultados.
Brasanac: Como otras veces, estuvo en su sitio, aunque no lo pareció.
Alegría: En su acción favorita provocó la falta del 1-2.
Castro: Tuvo la caña preparada.
Poyet: Que un entrenador sea incapaz de encontrar acomodo a un jugador como Rubén Castro por prejuicios tácticos lo descalifica totalmente. En cuanto a modelo de juego ya nadie puede llamarse a engaño: las cartas están boca arriba. La victoria le da oxígeno, aunque debe valorarse con la medida del bajísimo potencial del rival.
Los comentarios son bienvenidos. En Twitter, @juanramonlara7.
Buenas a todos,
ResponderEliminarCoincido contigo JR, excepto que no creo que Adan pudiera hacer mucho mas en el gol. Para mi es evidente que se le puede sacar muchisimo mas partido a esta plantilla a pesar de sus carencias, especialmente si te da por alinear los mejores.
Incluso con la victoria, Poyet va cavando su tumba pasito a pasito, a su ritmo constante, tanto en el campo como en los microfonos cada vez habla de la aficion. Hasta me pregunto si estara empezando a buscar que lo echen con ese despecho a Ruben. Creo que varios jugadores han perdido ya la confianza en el entrenador (Bruno, Ceballos, Durmisi, Ruben, por nombrar algunos) y otros mas estaran al caer en la desidia.
Como bien dices, el equipo deambulara sin notarse mano del entrenador, sobreviviendo por detalles individuales hasta que otro equipo con calidad o buen rigor tactico nos parta la cara sin misercordia y sin despeinarse. Ninguno esperaba que el equipo estuviera definido y rodado al 100% a estas alturas, pero el problema es que Poyet en este tiempo no ha construido poco a poco practicamente nada salvo validar a Alegria para Primera, de hecho, esta empezando mas a deconstruir lo poco existente. Menos mal que la aficion ha despertado y no se contenta ya con la sopa boba ni palabreria hueca.
Cuando a estas alturas es evidente que el exito o fracaso dependera de lo entonados que esten los futbolistas en momentos clave, ya que desde el banquillo no van a venir soluciones (si es que no llegan tiros al pie) bien haria Torrecilla desde ya en pese a dar un discurso de apoyo en publico ir buscando en privado un entrenador que sepa sacar rendimiento para el proximo paron. Sino, debera hacerlo con prisas tras el proximo ridiculo.
Saludos bohemios.
Este asunto de si lo bueno y lo malo son cosa del entrenador o de la plantilla es una de las discusiones más viejas de este mundillo, y naturalmente sólo es demostrable si hay cambio (y aun así no dejamos de jugar a las ucronías: p.ej. es indemostrable si Velázquez hubiese hecho reaccionar a ese equipo). ¿Jugarían mejor estos con un entrenador de nivel medio de Primera? Yo también estoy convencido de que material hay.
EliminarYo en lo que sí disiento de casi todos es en lo de que no se ve la mano de Poyet. Yo creo que sí, y que el estilo es ya el que él quiere. Saldrá bien o mal, meteremos goles o los recibiremos, pèro este correcalles permanente, esa presión obsesiva al balón sin mirar atrás ni a los lados, los ataques que intentan ser rápidos (aunque últimamente sin abusar del pelotazo)... son marcas de estilo. A mí no me va, pero lo respeto. El desorden lo llevo peor. Y la ausencia de RC no la respeto.
De momento sí es cierto, para nuestra felicidad de nuestros corazones (aunque nuestros intelectos se nos subleven un poco) es que el balance de puntos es bueno. Siendo realistas de Camp Nou, venida del Madrid y visita al innombrable estadio difícilmente sacamos más de un punto, y un 3/2/1 en el resto del calendario es más que decente, à mon avis.
Saludos
JR
Un 4-5-1 (distribuyendo como queráis los 4 defensas, los 5 medios y el único delantero) es una aberración táctica. Una antiguedad.
ResponderEliminarSin extremos, sin laterales desdoblando (solo piccini en sus aventuradas y poco preparadas subidas), con un solo punta que se mata solo entre centrales... entregandote a que un magnífico Joaquin de 35 años te lo resuelva todo.
Lo de Rubén en el banquillo no es una osadía.. es una provocación.
Si pedíamos que jugara en punta junto a Alex... se carga a los dos... porque el sabe de esto y la afición no.
Error !! Porque la afición es la que te puede aguantar si sale racha mala (ej Mel) o la que creo te va a echar a la primera de cambio.
Tas reido de la gente.. y te salva porque milagrosamente se ha ganado.
Así que mas te vale seguir ganando.
Que torpísimos llegan a ser algunos. Ya tiene a la prensa y a gran parte de la afición soliviantada.
Hoy no se habla de la victoria y del salto clasificatorio sino de la suplencia de Rubén. Que tío mas torpe.
4-5-1 ?? Enga Gustavo !
Un 4-5-1 con Cejudo y Felipe de "extremos" se parece casi a aquéllos de Aimar, que creo fue el primero que montó ese sistema en España. Ciertamente por bandas se llegó muy muy poquito, y todo quedó a inspiración de Joaquín. Incluso el remate.
ResponderEliminarLas declaraciones, en fin... " A pesar de tener unas buenas chances, con Joaquín, nos la jugamos con dos delanteros. " Cinco minutos. Pues vale.
Salud
JR
http://sevilla.eldesmarque.com/real-betis/86689-poyetveteya-se-convierte-en-tendencia-en-twitter
ResponderEliminarSe lo ha buscado el solito. No me extrañaría nada gran pitada al principio del partido del Español.
Del Real Betis no se ríe nadie.
La opción buena siempre es tener a la gente de tu lado
Es poco inteligente, sí. De todos modos tal vez se esté tensando la cuerda más de la cuenta. No estamos para colgarnos de un árbol...
ResponderEliminarJR
No me resulta fácil escribir este comentario.
ResponderEliminarAsisto entre triste y sorprendido a lo que leo en este blog.
Triste porque no me esperaba semejantes opiniones de vosotros y sorprendido porque sencillamente los hechos que relatais no se ajustan a la verdad. Curiosamente, a lo que sí se ajustan es al relato oficial que la prensa sevillana ha decidido crear en torno a la figura de poyet.
HECHOS OBJETIVOS QUE NO ACEPTAN DISCUSIÓN:
-El betis dominó el partido tanto desde el punto de vista territorial (se jugó más en mitad de campo contrario que en el propio) como de posesión (tuvimos mucho más la pelota que osasuna).
-El betis tuvo muchas más ocasiones claras que Osasuna: hasta siete para nosotros (los dos goles, la de Joaquín que se queda solo, un cabezazo claro de sanabria a pase Álex M desde la banda, otro de sanabria que salvan bajo puerta, otra más de sanabria que chuta desde el borde del área y paradón del portero y la jugada con los dos disparos de mandi primero y Felipe Gutiéerez después con sendas intervenciones fantástasticas del portero) y sólo dos para Osasuna: la que salva bajo palos Felipe G. y el gol, en fallo clamoroso de nuestro portero). Sí, he dicho fallo clamoroso de adán. Y sí, he dicho que el portero de Osasuna hizo tres paradones. esto para los que van diciendo por ahí que el resultado del partido fue Osasuna 1, nauzet 2. Adán, por cierto, lleva ya al menos dos partidos que no para ni una (el día de Madrid todo lo que fue a puerta entró).
-Tras el empate de osasuna el mando del partido fue de forma indiscutible para el Betis. Se fue a por los tres puntos descaradamente, con las limitaciones que tenemos claro está.
HECHOS SUBJETIVOS QUE POR SUPUESTO PUEDEN SER REBATIDOS:
El betis hizo un partido entre decente y bueno. El desarrollo y el resultado final avalan la decisión de poyet de dejar en el banquillo a rubén Castro. Sanabria (y yo creo que alegría también) ofrecen argumentos más que suficientes para cubrir el apartado anotador del equipo, sobre todo si la segunda línea (Felipe, Joaquón, otros) sigue aportando algo también.
Otra cosa, JR: Totalmente de acuerdo en tu análisis de la propuesta futbolísta de Poyet. A ti no te gusta y a mí ni me gusta ni me disgusta. Si da resultado me parecerá bien y si no mal. Ahora bien, por no ajustarse a los parámetros de tu Dios Guardiola no creo que tenga que ser descalificada.
Poyet tiene un plan y quiere que el Betis juegue de una manera determinada. eso ya es algo. Cierto que el método elegido por el charrúa no pasa por la ocupación racional de espacios ni se basa en la calidad técnica individual de los jugadores. Pero ojo, que tampoco veo yo renuncia al balón ni cesión del dominio del juego al contrario. El equipo no abusa del pelotazo y existe una intención clara de combinar entre líneas.
Así lo veo yo, vaya.
PD: en el partido contra el Madrid tuvimos más posesión de balón y jugamos más en campo contrario que los merengues. Hubo muchas conducciones en vertical en mediocampo (demasiadas, y probablemente esa fue una causa de la estrepitosa derrota, junto con, en mi opinión, la "ausencia" de portero). LLegamos mucho al área del Madrid con peligro, no sé si tanto como ellos a la nuestra (que por cierto, no fue tanto) pero sí lo suficiente para afirmar que Rubén no estuvo nada acertado en las cercanías del área.
Gracias por el comentario, Javi, ante todo. Yo, pese a las muchas lecturas mediáticas y casi políticas que tienen últimamente los asuntos del Betis, sus técnicos y sus entornos, no me tomaría las polémicas de un modo demasiado, digamos, emocional. Bastante tenemos con que la pelota entre. Es mi forma de verlo, claro.
EliminarTraté de que mi inmenso cabreo con Poyet por sacar del equipo a Castro no me obcecara, y como estoy de acuerdo en la mayoría de valoraciones del partido que haces, creo que el análisis las refleja. Es cierto que el Betis fue mejor, ocasiones en mano, y que tuvo dominio en al menos dos tercios de partido. En cuanto a rendimiento creo que hemos jugado tres partidos a priori muy difíciles, dos contra candidatos muy claros al descenso, y cuatro contra rivales de nuestro nivel. Aún no me atrevo a decir en qué punto estaremos.
Mi otra diferencia con Poyet (además del tema Rubén) es cierto que es el modelo de juego, pero por supuesto que lo veo lícito, e incluso puede ser más vistoso que el fútbol posicional ortodoxo. En realidad hay dos diferencias: una esa que dices de un mayor desorden (o movilidad) en ataque, y más velocidad, menos pausa; la segunda, coherentemente, es que la presión alta se basa más en el físico (los Brasanac o Petros) que en cuidar el toque para perderla después de una larga secuencia de pases, cosa que mejora mucho el rendimiento de esa presión tras pérdida. Pero es cierto que este Betis último, al menos con Mandi en el campo, cuida la salida de balón más que el de Merino. En realidad no son modelos incompatibles: este modelo de juego ante un Madrid (bueno técnicamente, y rápido) es un suicidio, pero ante peores equipos y si conseguimos una salida de atrás un poquito mejor que encierre al rival puede ser una bomba, si mezclamos un poquito ´más de elaboración (un poquito de guardiolismo) con esa presión desaforada. El riesgo es alto, pero si se hace bien la cruz puede ser cara ante muchos rivales.
un saludo,
JR
Voy a darte la razón en casi todo lo que comentas Javi Rubio. Sin embargo el gran agujero de esta propuesta es la presión "irreflexiva" que menciona el autor combinada con malos defensas, que nos va a costar continuos ridículos ante los 6 equipos de arriba. Un buen medio centro posicional, como reclamó JR tras lo de Anoeta, sería un gran contrapeso a las "poyadas"...
EliminarAl menos Poyet ha tenido los arresto de hacer cambios y el mensaje para la plantilla de que se puede cargar a cualquiera es importante para que nadie se crea intocable.
ResponderEliminarA mí me gustó el planteamiento táctico de Poyet, peo me disgustaron algunas piezas. Me encantaría ver a Rubén en donde jugó Joaquín, con libertad de movimientos; no en vano él es un especialista en lo que hizo ayer el portuense. En el lubar de Cejudo hubiera puesto a Joaquín, pero no para todo el partido, sólo hasta abrir la lata. Y por último, Álex Alegría me parece un jugador más completo que Sanabria, sin que me disguste este.
Por otra parte, creo que Jonas Martin es un buen fichaje, aunque todavía no está al cien por cien y perdiera un par de balones peligrosos en el medio campo, pero aporta algo que nos faltaba en el equipo.
Saludos...
Perdón por las faltas de ortografía del mensaje anterior, pero lo escribí muy rápido pensando que no se iba a poder publicar, como me viene sucediendo desde hace unas semanas...
ResponderEliminarEste por suerte sí ha entrado. Si no, email, sin problemas. ;)
EliminarJOnas es bueno, pero es cierto que perdió balones delicados (que por cierto apenas aparecen en las estadísticas, no entiendo por qué).
El tema de Rubén y la mediapunta me ronda la cabeza desde un partido de Copa en Getafe (1er año de Mel). Hay dos asuntos, ligados: si es capaz de atrasarse y cerrar al pivote rival en defensa, como hizo Joaquín el viernes (que creo que Rubén puede), y si es capaz de dinamizar el juego como también hizo J. (que creo que puede menos). La tercera labor importante de un mediapunta, ponerse de gol, por desgracia Joaquín no te la garantiza (aunque el viernes hiciera uno y casi otro) y Rubén sí. Cuestión de pros y contras.
Otra opción es la que hizo Mel con Molina/Sta. Cruz: que sea el tanque quien baje a pedirla en posiciones de mediapunta (y de paso que trabaje ahí). Y otra más, mi favorita, que un presunto extremo ataque por dentro t Rubén caiga a banda un poco en ataque; y que luego de nuevo él o el tanque defienda al pivote rival (no al lateral dcho. rival).
Variantes tácticas para encajar a Rubén, en mi opinión, hay muchas. Si hay que decirle que corra más y cambiarlo en el min. 70, hágase, pero lo que me parece indefendible es sacarlo del equipo porque el entrenador no es capaz de encajarlo en sus prejuicios tácticos. Mientras Rubén esté en forma y sea disciplinado no me parece presentable.
Saludos.
JR
En 6 años Rubén no ha devuelto bien ni una pared a un compañero, unas veces porque no le han salido y las más porque no le ha dado la gana. No tiene condiciones para la mediapunta ni creo q a su edad le apetezca reconvertirse
EliminarLeo los comentarios con atención y tanto en los favorables como en los desfavorables se pasa de puntillas por un detalle: el rival era de segunda división. Casi me da vergüenza entrar en detalles tácticos viendo a Osasuna.
ResponderEliminarA mi no me desagrada q poyet tire por el 4-2-3-1, muy adecuado para plantillas normalitas como la nuestra. Ver al Betis defender en 4-3-3 ha sido un auténtico dolor de muelas. Además era un sistema que requiere buenos jugadores en todas las posiciones y nosotros tenemos auténticas vulgaridades jugando cada domingo. Ahora entiendo detalles de la planificación: la sobredosis de centrocampistas con mucho gusto por las conducciones, la ausencia de pivotes posicionales, delanteros tanques que juegan demasiado desconectados. Ahora bien estos del box to box me cansan y me parecen un timo: sin un Beñat o Alexis no hay manera de asentarse en zona Europea.
Una vez puestas las cartas boca arriba bien haría Poyet en darle la titularidad a Musonda, enganchar para la causa a Castro, Ceballos y Bruno, olvidarse de Brasanac y darle una solución estable al puestocentrocampista de banda izquierda.
Saludos
Sí, el estilo de juego explica esa sobrepoblación de interiores que tocan poco y corren mucho.
EliminarEn lo de Osasuna llevas toda la razón. Esas valoraciones es mejor hacerlas no por el partido (a veces los rivales parecen malos gracias a que los tuyos lo hacen bien) sino por hechos objetivos anteriores, y estos son que OSasuna subió de rebote y tiene una plantilla muy cortita de calidad. Igual que R. Madrid o Barcelona no son partidos para tomar referencias, este o Granada tampoco.
Saludos,
JR
Bueno, efectivamente ya se ve el sello de Poyet, tanto en lo deportivo: Presión sin cabeza, partidos a cara o cruz, cambiar tarde y mal y despreciar a cualquier jugador que no encaje en su sistema: D.Ceballos, Musonda, ¿Donk? o R.Castro,… Como en lo extradeportivo: Meterse en cualquier charco, buscar polémica incluso con la propia afición, etc…
ResponderEliminarMientras tanto, veo con (insana) envidia al otro equipo de la ciudad, donde más allá de resultados la institución funciona, y todos sabemos que el director deportivo es capaz de bajar al vestuario a enmendarle la plana a Sampaoli o al iluminado de turno… ¿Hay en nuestro equipo alguien capaz de hacer esta función?, y que conste que Torrecilla me parece un gran profesional (aunque los Brasanac y Zozulia me hicieron dudar bastante…).
En fin, para este viaje creo que me quedaba con Merino, que consigue más o menos los mismos puntos, no dice tonterías y es bético.
PD: Por terminar con algo de optimismo me quedo con dos ideas: Al menos Poyet ha sido capaz de cambiar de sistema y abandonar su rudimentario 4-3-3… No pierdo la esperanza en que (aunque sea torpemente), tenga capaz de aprendizaje.
Y la última: Puede que tenga suerte (si no entra la de Felipe) y eso es muy importante en el juego este de la pelotita…
Saludos verdiblancos
Pedro
Curiosamente yo creo que Ceballos sí encaja en su modelo y en el 4-3-3. Yo no comparto el modelo, como dije arriba, pero me parece respetable que intente el suyo, y si funciona, pues muy bien. En realidad creo que el 60% del cabreo general es por el affaire Rubén. Y es normal.
EliminarSaludos
JR
Asisto perplejo a algunos comentarios del partido que perpetró el Real Betis Balompié el pasado viernes ante Osasuna. Osasuna, digo, sí, en primera, pero con un portero que fue titular en el Sabadell hace unas dos temporadas si no mal recuerdo. Que quedó sexto el año pasado en segunda, con Digard (exfutbolista según se vio en el propio partido) como jefe del mediocampo pamplonica, y con su mejor futbolista, Sergio León, excanterano bético y futbolista con 27 años que viene de segunda. A este equipo costó "Dios y ayuda" ganarle, y se hizo en el último minuto y gracias a un fallo clamoroso del guardameta. Sin comentarios. Hacía tiempo que no veía un candidato tan claro a estar en segunda división más pronto que tarde.
ResponderEliminar1. Sorpresa absoluta en la alineación. Castro al banquillo. Esto sólo pasa en el Betis. Otra vez un club sin jerarquía, sin mando, sin rigor. Soy absolutamente crítico con la prensa sevillana, como todo el que lee este blog sabe, pero esto no tiene un pase. Tienen razón en esta crítica. Hablamos de Rubén Castro, autor de dos goles en el Nou Camp ante el Barsa, autor de dos goles en Valencia, Mestalla. Máximo goleador de la historia del Real Betis, futbolista buque insignia del equipo al que le debemos los pocos momentos de disfrute que hemos recibido en los últimos 7 años, se dice pronto. Y llega un señor, Poyet, entrenador, que ya desde el principio tenía claro que le sobraba Rubén, como se vio claro en pretemporada, y después de hacerlo correr como un loco detrás de Carvajal, lo deja en el banquillo para poner a Sanabria, que habrá costado 7 millones de euros y por razones estratégicas debe jugar, pero que lleva sin jugar dos meses. Pensemos con tranquilidad. Esto no pasa en ningún sitio.
2. ¿Dónde se cree que ha llegado Poyet? ¿Al Alcorcón, con todos mis respetos? Mal aconsejado seguramente, trata de hacer ver que sabe más que nadie, y se permite el lujo constantemente de decirle a la Santa Afición Verdiblanca de lo que debe ver, cómo se debe sentir, qué reacción debe tener respecto al partido próximo. Y nadie desde las altas esferas del club con un poquito de conocimiento le para los pies.
3. ¿El Betis en Pamplona? Mal. Vi a Adán dubitativo. Espero que no se contagie, o que no lo desactive el entrenador, como Bruno, Ceballos, Castro, Donk, Fabián, Nahuel, etc. La defensa es un coladero, empezando por Piccini, y terminando con los centrales, que no pillan una por alto. Todos los balones colgados de Osasuna fueron rematados por sus jugadores. El mediocampo, excepto Petros, mal. Jonas, buenos cambios de juego y perdidas muy peligrosas que creaban incendios. Y delante el gran Joaquín, puro nervio y honradez, y un Sanabria que hasta el momento amaga más que da. No hay plan, tal y como plantea JR, moneda al aire, presión descoordinada, lucha y poco más. Para esto, mil veces mejor Merino.
4. Termino. La noche y el día. Sevilla FC y Real Betis. Firmo lo que dice el compañero Pedro. Envidia insana. Un plan, un proyecto, gente de fútbol que conoce el club, una línea a seguir, un Sampaoli que llegó tan despistado como Poyet y que va camino de labrarse un carrerón en Europa, una cantera que funciona y de qué modo.
Soy el primero que querría equivocarme, pero es lo que veo. Saludos.
Voy por párrafos.
ResponderEliminar0. Cierto, se ganó a un semisegunda, pero se ganó, y justamente. Tampoco dramaticemos.
1. Totalmente de acuerdo.
2. Debería callarse más, sí.
3. No me gusta el estilo, pero tampoco me gustaba el de Merino. Ahora veo una cierta voluntad de jugar el balón y dominar el partido (esto segundo no es imprescindible; lo primero, sí). Lo de Merino no tenía nombre.
4. Creo que no debemos mirar más de la cuenta al vecino, o lo vamos a pasar mal. Es evidente que el Sevilla lleva años por encima de sus posibilidades aparentes, y eso es que trabajan muy bien. Habrá que copiarles algunas cosas, pero si nos comparamos permanentemente vamos a fustigarnos hasta que Monchi se vaya (que espero sea pronto).
Salud
JR
(En mi modesta opinión todo, claro)
EliminarExacto, hasta que Monchi se vaya. Yo también creo que ese día bajarán algún escalón.
EliminarPero da igual, nosotros seguimos de cháchara en el descansillo con la portera Lopera...
Y con la tuna.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
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