Hoy, domingo 28 de febrero, me será imposible seguir íntegramente el Cartagena - Betis, de modo que no será publicado el correspondiente post.
Gracias.
domingo, 28 de febrero de 2010
sábado, 20 de febrero de 2010
Betis 0 – Albacete 0 (25ª jornada de Liga de Segunda División)
Sevilla, sábado 20 de febrero de 2010, 18:00 horas.
REAL BETIS (0): Goitia, Damià (Caffa, 83), Melli, Carlos García, Nacho; Iriney (Mehmet Aurelio, 72), Arzu; Jonathan Pereira, Emana, Capi (Pavone, 61); y Sergio García.
ALBACETE BALOMPIÉ (0): Cabrero; Blanco, Alberto, Bizera, Kike; Verza; Fernando Sales (Pablo Gil, 67), Sousa, Antonio Hidalgo; Stuani (Altobelli, 60) y Salva Ballesta (Pereira, 60). Árbitro: Gil Manzano, extremeño. Doble amarilla para Kike y roja directa para Arzu. Amarillas para Alberto, Sergio García, Salva, Goitia, Pablo Gil y Antonio Hidalgo.
Desesperante y al tiempo esperanzador empate del Betis hoy: la falta de fortuna y de goleadores arriba ha privado de la victoria a un equipo muy superior a su rival, un paupérrimo Albacete que se limitó a aparcar de mala manera el autobús ante su portería. Pese a las expulsiones el encuentro fue muy homogéneo en el tiempo: un monólogo del Betis, que casi siempre tuvo el balón y jugó en campo rival. Tenemos la sensación (inesperada, lo confieso) de que Fernández ha venido a trabajar con notable dedicación, y se aprecia la voluntad y práctica durante la semana para paliar los defectos del equipo, tales como la fortaleza mental para mantener la tensión o la forma física (en fuerza y resistencia) de ciertos delanteros. Falta saber si el equipo mantendrá esta buena actitud, que le daría aún opciones de ascenso en una liga tan larga como ésta. La próxima semana será probablemente decisiva en este aspecto.
Con el balón en posesión del Albacete
Con el Betis en su usual 4-2-3-1, el Albacete se sitúa con un 4-4-2 con rombo en el centro del campo (Verza atrás e Hidalgo delante), y deja arriba a Salva y Stuani. Más lento aún que de costumbre y siempre de escasa movilidad, el primero tuvo pocas opciones de juego tan lejos de la portería como lo dejó el juego de su equipo; Stuani es controlado, pese a sus buenos desmarques, por unos agresivos y adelantados centrales béticos, que arriesgan bastante al tirar la línea. Como los interiores albaceteños juegan muy poco abiertos (por cuestiones defensivas), los manchegos se hacen un embudo en ataque y les cuesta un mundo hacer su juego ante un bien situado Betis cuyos defensores se anticipan casi siempre. Iriney y Arzu, muy móviles y trabajadores, ahogan a Hidalgo, mientras los mediapuntas hacen un buen trabajo de presión.
Al Albacete ni siquiera le salieron sus varias jugadas ensayadas para el balón parado, salvo la inicial que le dio su única ocasión tras un robo.
Con el balón en posesión del Betis
Para compensar la debilidad defensiva producida por su escaso físico y por su esquema de juego, que deja en inferioridad a su pivote, el Albacete trata de abrigarse metiendo muy dentro a sus dos alas, especialmente a la izquierda, y basculando mucho hacia el lado del balón. Como consecuencia de ello, del buen toque bético y de buenos cambios de juego, los laterales, especialmente Damià, encuentran una auténtica autopista por las bandas. Stuani y Salva presionan poco y mal, el Betis la toca con cierto ritmo (Arzu sobre todo), y los hombres de arriba demuestran una mejor forma física, notablemente Sergio y Pereira, de modo que el Betis la tiene mucho y las ocasiones van cayendo por su peso, pese a la acumulación de jugadores en la frontal, que dificulta las maniobras. Pereira puede con su lateral casi siempre y percute infinidad de veces por su banda, mientras los demás delanteros hacen sus permutas habituales con notable movilidad.
El Betis, aun tras jugar bien, no conceder ocasiones al rival y disfrutar de media hora de superioridad, no ganó el partido, y ello por varias razones. En primer lugar, falta aprovechamiento de las innumerables jugadas a balón parado que ofrece un partido así, debido a la mala ejecución (de Emana en balones a la olla, de Sergio -¿por qué Sergio?- en el penalti) y a la falta de fe con la que los hombres altos del Betis acuden al remate; Víctor Fernández ha declarado que este será uno de los aspectos a trabajar próximamente. En segundo, a pura y dura mala suerte. Pero esto no debe esconder la tercera razón: Lopera lleva años (desde tiempos de Juande) eludiendo fichar buenos delanteros por la simple razón de que son caros, y prefiere cubrir posiciones en las que la calidad es más económica; las consecuencias de semejante planificación son éstas: lo barato sale caro.
Jugador por jugador
Goitia: Atento en las salidas, que fueron su único trabajo.
Damià: Hizo un aceptable partido, sobre todo porque estuvo agresivo en defensa, pero lo cierto es que no le exigieron apenas en ese aspecto y que en ataque jugó a placer, prácticamente solo, sin ser capaz de aprovecharlo debidamente; el partido, tácticamente, era ideal para sus características, pero no supo dar una sola bola decisiva.
Melli: Correcto y agresivo. La sacó bien.
Carlos García: Junto a sus compañeros de línea arriesgó, se anticipó al rival y tiró el fuera de juego con acierto. Estuvo pegajoso como siempre y además supo, esta vez, apartar las manos a tiempo. Cumplió también con el mandato, entrenado esta semana, de no recular cuando el rival ataca en inferioridad numérica.
Nacho: Aceptable partido; en defensa no le buscaron mucho las espaldas, y así se sintió libre para atacar con acierto. Debe centrar con más potencia desde lejos.
Iriney: Trabajó y dio instrucciones. Fue correctamente relevado porque en el último cuarto de partido suele bajar mucho.
Arzu: Muy bien, porque ha sumado trabajo y actividad a su buena forma técnica. Su expulsión al final no fue merecida.
Pereira: Muy bien en la banda (único hombre de ataque de posición más o menos fija), ha ganado mucho en velocidad, y eso le permitió meter el cuerpo muchas veces para ganar la posición a su lateral, al que sometió a un suplicio hasta que provocó su expulsión. Por buscarle un defecto, puede pisar más las zonas de remate.
Emana: Primero no quiso y luego no pudo. En la primera parte hizo su juego, pero más desconcentrado y frívolo de lo debido. En la segunda parte lo intentó todo pero no le salió. Debe jugar más a dos toques: parece obsesionado con o bien tocarla a la primera o bien hacer jugada personal. Al acercarse el Mundial irá mejorando en forma física: parece estar reservándose para coger el pico en junio.
Capi: Parece difícil que recupere ya su antigua velocidad en corto, pero ofrece trabajo, manejo de pelota y algunos buenos pases en profundidad al doblar hacia dentro desde la banda. Debería sacar más a balón parado.
Sergio García: Ha demostrado que su único problema era la falta de entrenamientos serios. Corrió bastante, jugó bien y estuvo desafortunado ante el gol, pero las ocasiones fueron casi todas suyas. A este nivel sí es de los mejores delanteros de Segunda. Debió olvidarse del árbitro.
Pavone: También ha mejorado gracias a los entrenos. Hizo mejorar al equipo en ataque.
Mehmet Aurelio: Continuó bien el trabajo de Iriney.
Caffa: Poco tiempo.
REAL BETIS (0): Goitia, Damià (Caffa, 83), Melli, Carlos García, Nacho; Iriney (Mehmet Aurelio, 72), Arzu; Jonathan Pereira, Emana, Capi (Pavone, 61); y Sergio García.
ALBACETE BALOMPIÉ (0): Cabrero; Blanco, Alberto, Bizera, Kike; Verza; Fernando Sales (Pablo Gil, 67), Sousa, Antonio Hidalgo; Stuani (Altobelli, 60) y Salva Ballesta (Pereira, 60). Árbitro: Gil Manzano, extremeño. Doble amarilla para Kike y roja directa para Arzu. Amarillas para Alberto, Sergio García, Salva, Goitia, Pablo Gil y Antonio Hidalgo.
Desesperante y al tiempo esperanzador empate del Betis hoy: la falta de fortuna y de goleadores arriba ha privado de la victoria a un equipo muy superior a su rival, un paupérrimo Albacete que se limitó a aparcar de mala manera el autobús ante su portería. Pese a las expulsiones el encuentro fue muy homogéneo en el tiempo: un monólogo del Betis, que casi siempre tuvo el balón y jugó en campo rival. Tenemos la sensación (inesperada, lo confieso) de que Fernández ha venido a trabajar con notable dedicación, y se aprecia la voluntad y práctica durante la semana para paliar los defectos del equipo, tales como la fortaleza mental para mantener la tensión o la forma física (en fuerza y resistencia) de ciertos delanteros. Falta saber si el equipo mantendrá esta buena actitud, que le daría aún opciones de ascenso en una liga tan larga como ésta. La próxima semana será probablemente decisiva en este aspecto.
Con el balón en posesión del Albacete
Con el Betis en su usual 4-2-3-1, el Albacete se sitúa con un 4-4-2 con rombo en el centro del campo (Verza atrás e Hidalgo delante), y deja arriba a Salva y Stuani. Más lento aún que de costumbre y siempre de escasa movilidad, el primero tuvo pocas opciones de juego tan lejos de la portería como lo dejó el juego de su equipo; Stuani es controlado, pese a sus buenos desmarques, por unos agresivos y adelantados centrales béticos, que arriesgan bastante al tirar la línea. Como los interiores albaceteños juegan muy poco abiertos (por cuestiones defensivas), los manchegos se hacen un embudo en ataque y les cuesta un mundo hacer su juego ante un bien situado Betis cuyos defensores se anticipan casi siempre. Iriney y Arzu, muy móviles y trabajadores, ahogan a Hidalgo, mientras los mediapuntas hacen un buen trabajo de presión.
Al Albacete ni siquiera le salieron sus varias jugadas ensayadas para el balón parado, salvo la inicial que le dio su única ocasión tras un robo.
Con el balón en posesión del Betis
Para compensar la debilidad defensiva producida por su escaso físico y por su esquema de juego, que deja en inferioridad a su pivote, el Albacete trata de abrigarse metiendo muy dentro a sus dos alas, especialmente a la izquierda, y basculando mucho hacia el lado del balón. Como consecuencia de ello, del buen toque bético y de buenos cambios de juego, los laterales, especialmente Damià, encuentran una auténtica autopista por las bandas. Stuani y Salva presionan poco y mal, el Betis la toca con cierto ritmo (Arzu sobre todo), y los hombres de arriba demuestran una mejor forma física, notablemente Sergio y Pereira, de modo que el Betis la tiene mucho y las ocasiones van cayendo por su peso, pese a la acumulación de jugadores en la frontal, que dificulta las maniobras. Pereira puede con su lateral casi siempre y percute infinidad de veces por su banda, mientras los demás delanteros hacen sus permutas habituales con notable movilidad.
El Betis, aun tras jugar bien, no conceder ocasiones al rival y disfrutar de media hora de superioridad, no ganó el partido, y ello por varias razones. En primer lugar, falta aprovechamiento de las innumerables jugadas a balón parado que ofrece un partido así, debido a la mala ejecución (de Emana en balones a la olla, de Sergio -¿por qué Sergio?- en el penalti) y a la falta de fe con la que los hombres altos del Betis acuden al remate; Víctor Fernández ha declarado que este será uno de los aspectos a trabajar próximamente. En segundo, a pura y dura mala suerte. Pero esto no debe esconder la tercera razón: Lopera lleva años (desde tiempos de Juande) eludiendo fichar buenos delanteros por la simple razón de que son caros, y prefiere cubrir posiciones en las que la calidad es más económica; las consecuencias de semejante planificación son éstas: lo barato sale caro.
Jugador por jugador
Goitia: Atento en las salidas, que fueron su único trabajo.
Damià: Hizo un aceptable partido, sobre todo porque estuvo agresivo en defensa, pero lo cierto es que no le exigieron apenas en ese aspecto y que en ataque jugó a placer, prácticamente solo, sin ser capaz de aprovecharlo debidamente; el partido, tácticamente, era ideal para sus características, pero no supo dar una sola bola decisiva.
Melli: Correcto y agresivo. La sacó bien.
Carlos García: Junto a sus compañeros de línea arriesgó, se anticipó al rival y tiró el fuera de juego con acierto. Estuvo pegajoso como siempre y además supo, esta vez, apartar las manos a tiempo. Cumplió también con el mandato, entrenado esta semana, de no recular cuando el rival ataca en inferioridad numérica.
Nacho: Aceptable partido; en defensa no le buscaron mucho las espaldas, y así se sintió libre para atacar con acierto. Debe centrar con más potencia desde lejos.
Iriney: Trabajó y dio instrucciones. Fue correctamente relevado porque en el último cuarto de partido suele bajar mucho.
Arzu: Muy bien, porque ha sumado trabajo y actividad a su buena forma técnica. Su expulsión al final no fue merecida.
Pereira: Muy bien en la banda (único hombre de ataque de posición más o menos fija), ha ganado mucho en velocidad, y eso le permitió meter el cuerpo muchas veces para ganar la posición a su lateral, al que sometió a un suplicio hasta que provocó su expulsión. Por buscarle un defecto, puede pisar más las zonas de remate.
Emana: Primero no quiso y luego no pudo. En la primera parte hizo su juego, pero más desconcentrado y frívolo de lo debido. En la segunda parte lo intentó todo pero no le salió. Debe jugar más a dos toques: parece obsesionado con o bien tocarla a la primera o bien hacer jugada personal. Al acercarse el Mundial irá mejorando en forma física: parece estar reservándose para coger el pico en junio.
Capi: Parece difícil que recupere ya su antigua velocidad en corto, pero ofrece trabajo, manejo de pelota y algunos buenos pases en profundidad al doblar hacia dentro desde la banda. Debería sacar más a balón parado.
Sergio García: Ha demostrado que su único problema era la falta de entrenamientos serios. Corrió bastante, jugó bien y estuvo desafortunado ante el gol, pero las ocasiones fueron casi todas suyas. A este nivel sí es de los mejores delanteros de Segunda. Debió olvidarse del árbitro.
Pavone: También ha mejorado gracias a los entrenos. Hizo mejorar al equipo en ataque.
Mehmet Aurelio: Continuó bien el trabajo de Iriney.
Caffa: Poco tiempo.
sábado, 13 de febrero de 2010
Recreativo de Huelva 1 - Betis 1 (24ª jornada de Liga de Segunda División)
Huelva, 13 de febrero de 2010, 18:00 horas.
RECREATIVO DE HUELVA (1): Guaita; Raúl Cámara, Iago Bouzón, Troest, Peña; Álvaro Antón, Jesús Vázquez, Emilio Sánchez, Aitor (Óscar Díaz, min. 64); Barrales (Pablo Sánchez, min. 68) y Braulio (Javi Fuego, min. 77).
BETIS (1): Goitia; Nelson, Melli, Carlos García, Nacho; Arzu, Iriney (Mehmet Aurelio, min. 66); Juanma (Damiá, min. 72), Pereira, Capi (Pavone, min. 72); y Sergio García.
Goles: 0-1, min.43: Sergio García. 1-1, min. 58: Emilio Sánchez.
Árbitro: Lizondo Cortés (Colegio valenciano). Mostró tarjeta amarilla a los locales Emilio Sánchez, y a los visitantes Melli, . Expulsó, por doble cartulina amarilla a Emilio Sánchez en el minuto 74.
El Betis ha tirado hoy por la borda de modo manso, inconsciente e irritante dos importantes puntos que lo alejan casi definitivamente de la posibilidad de ascender. Tras unos setenta primeros minutos más o menos decentes y ante un Recreativo cansado y en inferioridad, dejó escapar una clara posibilidad de victoria con aparente indiferencia. Demostraron los jugadores una falta de carácter (llamémosle así) que es una de las causas de la decadencia deportiva del equipo.
Primera parte
En un estadio que hoy sufría un viento fuerte y racheado el partido se plantea de forma similar al de Córdoba: rival en 4-4-2 que busca el juego directo con dos hombres altos arriba y, esta vez, presiona con fuerza; uno de sus delanteros (Barral) incomoda un poco a Arzu e Iriney y baja en ocasiones recibir en la mediapunta sin que los centrales béticos le incomoden. Mientras, el Betis repite esquema e intenciones con su 4-2-3-1 usual en el que Pereira se desplaza al centro a cubrir la baja de Emana mientras Juanma cubre su sitio. El Betis la tiene más en el centro y la toca con cierta velocidad e inteligencia, pero sus ataques mueren arriba por la preocupante falta de presencia física de Capi, Sergio y Pereira, que son superados casi siempre por los defensas onubenses, más rápidos y fuertes que ellos. Juanma está algo más veloz, pero como siempre busca un juego horizontal y sin mordiente. El Recre, sin embargo, muestra un juego primitivo y frontal pero eficiente, y llega más veces a puerta, aunque el gol caiga del lado bético.
Segunda parte hasta la expulsión de Sánchez
El Recreativo, aun con viento a favor, va notando el desgaste físico y, con el paso de los minutos, permite al Betis tocarla con cierta comodidad, aunque los sevillanos siguen desperdiciando llegadas claras. Un doble error de Capi e Iriney provoca sin embargo la jugada aislada en la que llega el empate.
Últimos veinte minutos
Tras la expulsión el Betis se encuentra en el escenario en el que un equipo se gana una clasificación al final de la temporada: rival de escasa calidad, fundido y con un hombre menos (algo que tantas veces ha servido de excusa a las derrotas propias), y un punto que perder por dos que ganar. Sin embargo, para desesperación de la afición, nadie parece ser consciente de la importancia de la situación; una vez más no hay un solo jugador que dé dos gritos o muestre el menor carácter, se permiten pérdidas de tiempo e incluso es el Recreativo el que llega más a puerta. Los cambios nada aportan y el partido muere sin siquiera encerrar al rival ni pillarlo a la contra.
Jugador por jugador:
Goitia: El gol fue de los que él suele parar, pero era un balón complicado. Por lo demás, una vez más, bien.
Nelson: Ha mejorado mucho en defensa, y eso es buena noticia. En ataque subió correctamente pero acabó sus jugadas lanzando verdaderas pedradas.
Melli: Inició el partido con una cesión criminal a su portero, pero aguantó bien el bombardeo aéreo del Recreativo.
Carlos García: Como Melli, soportó bien el juego directo rival pero permitió a Barral un juego demasiado cómodo en la mediapunta. No corrige el defecto de poner las manos sobre los rivales, que en cada partido le cuesta un par de faltas.
Nacho: Está rapidito; defendió y subió con corrección, aunque centró con demasiada blandura. Su proyección ofensiva le da el plus de aprovechar el pasillo que deja Capi -que busca el interior por ser diestro-. Aprueba.
Iriney: En día poco afortunado, perdió un balón decisivo y no hizo la falta táctica de rigor.
Arzu: Hizo circular muy bien la pelota para llevarla a donde debía hacer daño. Desperdició una ocasión clara por no usar el punterazo.
Juanma: Anduvo más rápido que hace una semana, pero como siempre su juego es tan estético como gaseoso y le tiemblan las piernas al llegar al área. Mucha diagonal, mucho manejo, poca presencia defensiva y ningún daño al rival.
Pereira: Le falta velocidad y capacidad física para ser vertical. Una versión algo más voluntariosa de Sergio.
Capi: Físicamente está muy lejos de ser el que fue, especialmente en cuanto a velocidad. Aún así conserva la calidad suficiente para meter tres o cuatro pases de gol.
Sergio García: Metió un golazo de clase, pero sigue molestando más que aportando en ataque. Sin entrenar a un ritmo profesional es imposible irse de nadie.
Mehmet Aurelio: No es hombre de media hora porque su ritmo de juego se puede mantener igual diez minutos que diez horas. Debió tomar mucha más responsabilidad en una situación como la de hoy.
Damià: Tal vez no sea justo cargar en él culpas, pero aporta muy poquito. Un par de desmarques mal terminados, y la misma pregunta de siempre: ¿de qué juega?
Pavone: Una perfecta nulidad.
RECREATIVO DE HUELVA (1): Guaita; Raúl Cámara, Iago Bouzón, Troest, Peña; Álvaro Antón, Jesús Vázquez, Emilio Sánchez, Aitor (Óscar Díaz, min. 64); Barrales (Pablo Sánchez, min. 68) y Braulio (Javi Fuego, min. 77).
BETIS (1): Goitia; Nelson, Melli, Carlos García, Nacho; Arzu, Iriney (Mehmet Aurelio, min. 66); Juanma (Damiá, min. 72), Pereira, Capi (Pavone, min. 72); y Sergio García.
Goles: 0-1, min.43: Sergio García. 1-1, min. 58: Emilio Sánchez.
Árbitro: Lizondo Cortés (Colegio valenciano). Mostró tarjeta amarilla a los locales Emilio Sánchez, y a los visitantes Melli, . Expulsó, por doble cartulina amarilla a Emilio Sánchez en el minuto 74.
El Betis ha tirado hoy por la borda de modo manso, inconsciente e irritante dos importantes puntos que lo alejan casi definitivamente de la posibilidad de ascender. Tras unos setenta primeros minutos más o menos decentes y ante un Recreativo cansado y en inferioridad, dejó escapar una clara posibilidad de victoria con aparente indiferencia. Demostraron los jugadores una falta de carácter (llamémosle así) que es una de las causas de la decadencia deportiva del equipo.
Primera parte
En un estadio que hoy sufría un viento fuerte y racheado el partido se plantea de forma similar al de Córdoba: rival en 4-4-2 que busca el juego directo con dos hombres altos arriba y, esta vez, presiona con fuerza; uno de sus delanteros (Barral) incomoda un poco a Arzu e Iriney y baja en ocasiones recibir en la mediapunta sin que los centrales béticos le incomoden. Mientras, el Betis repite esquema e intenciones con su 4-2-3-1 usual en el que Pereira se desplaza al centro a cubrir la baja de Emana mientras Juanma cubre su sitio. El Betis la tiene más en el centro y la toca con cierta velocidad e inteligencia, pero sus ataques mueren arriba por la preocupante falta de presencia física de Capi, Sergio y Pereira, que son superados casi siempre por los defensas onubenses, más rápidos y fuertes que ellos. Juanma está algo más veloz, pero como siempre busca un juego horizontal y sin mordiente. El Recre, sin embargo, muestra un juego primitivo y frontal pero eficiente, y llega más veces a puerta, aunque el gol caiga del lado bético.
Segunda parte hasta la expulsión de Sánchez
El Recreativo, aun con viento a favor, va notando el desgaste físico y, con el paso de los minutos, permite al Betis tocarla con cierta comodidad, aunque los sevillanos siguen desperdiciando llegadas claras. Un doble error de Capi e Iriney provoca sin embargo la jugada aislada en la que llega el empate.
Últimos veinte minutos
Tras la expulsión el Betis se encuentra en el escenario en el que un equipo se gana una clasificación al final de la temporada: rival de escasa calidad, fundido y con un hombre menos (algo que tantas veces ha servido de excusa a las derrotas propias), y un punto que perder por dos que ganar. Sin embargo, para desesperación de la afición, nadie parece ser consciente de la importancia de la situación; una vez más no hay un solo jugador que dé dos gritos o muestre el menor carácter, se permiten pérdidas de tiempo e incluso es el Recreativo el que llega más a puerta. Los cambios nada aportan y el partido muere sin siquiera encerrar al rival ni pillarlo a la contra.
Jugador por jugador:
Goitia: El gol fue de los que él suele parar, pero era un balón complicado. Por lo demás, una vez más, bien.
Nelson: Ha mejorado mucho en defensa, y eso es buena noticia. En ataque subió correctamente pero acabó sus jugadas lanzando verdaderas pedradas.
Melli: Inició el partido con una cesión criminal a su portero, pero aguantó bien el bombardeo aéreo del Recreativo.
Carlos García: Como Melli, soportó bien el juego directo rival pero permitió a Barral un juego demasiado cómodo en la mediapunta. No corrige el defecto de poner las manos sobre los rivales, que en cada partido le cuesta un par de faltas.
Nacho: Está rapidito; defendió y subió con corrección, aunque centró con demasiada blandura. Su proyección ofensiva le da el plus de aprovechar el pasillo que deja Capi -que busca el interior por ser diestro-. Aprueba.
Iriney: En día poco afortunado, perdió un balón decisivo y no hizo la falta táctica de rigor.
Arzu: Hizo circular muy bien la pelota para llevarla a donde debía hacer daño. Desperdició una ocasión clara por no usar el punterazo.
Juanma: Anduvo más rápido que hace una semana, pero como siempre su juego es tan estético como gaseoso y le tiemblan las piernas al llegar al área. Mucha diagonal, mucho manejo, poca presencia defensiva y ningún daño al rival.
Pereira: Le falta velocidad y capacidad física para ser vertical. Una versión algo más voluntariosa de Sergio.
Capi: Físicamente está muy lejos de ser el que fue, especialmente en cuanto a velocidad. Aún así conserva la calidad suficiente para meter tres o cuatro pases de gol.
Sergio García: Metió un golazo de clase, pero sigue molestando más que aportando en ataque. Sin entrenar a un ritmo profesional es imposible irse de nadie.
Mehmet Aurelio: No es hombre de media hora porque su ritmo de juego se puede mantener igual diez minutos que diez horas. Debió tomar mucha más responsabilidad en una situación como la de hoy.
Damià: Tal vez no sea justo cargar en él culpas, pero aporta muy poquito. Un par de desmarques mal terminados, y la misma pregunta de siempre: ¿de qué juega?
Pavone: Una perfecta nulidad.
domingo, 7 de febrero de 2010
Betis 1 - Hércules 1 (23ª jornada de Segunda División)
Sevilla, domingo 7 de febrero de 2010, 12:00 horas.
REAL BETIS (1): Goitia; Nelson, Melli, Nano, Nacho; Iriney, Arzu; Jonathan Pereira (Juanma, 53), Emana, Capi (Pavone, 68); y Sergio García (Caffa, 85).
HÉRCULES CF (1): Calatayud; Juanra, Abraham Paz, Sergio Rodríguez, Dani Bautista; Farinós, Tiago Gomes; Rufete (Kiko Femenía, 56), Tote (Cristian, 73), Sendoa (Del Olmo, 58); y Portillo.
Goles: 1-0: Min. 24, Sergio García. 1-1: Min. 61, Farinós.
Árbitro: Francisco Ramón Hevia Obras, castellano-leonés. Amonestó a Sergio Rodríguez. Expulsó a Abraham Paz (min. 93) y a Emana (a partido acabado), ambos con roja directa. Amonestó al local Pavone y a los visitantes Sergio Rodríguez, Tiago, Del Olmo, Abraham Paz y Tote.
El Betis ha dejado escapar hoy buena parte de sus pocas posibilidades de ascenso al empatar en un aceptable partido ante el Hércules. El encuentro, especialmente en la primera parte, ha tenido calidad técnica y ritmo alto, aunque con el paso de los minutos se ha ido desinflando por el bajón físico del Betis y el conformismo del Hércules.
El Hércules se presenta inicialmente con un 4-2-3-1 escalonado, en el que Farinós hace de mediocentro y chico para todo (sólo le faltó rematar los córneres que sacaba), Tiago juega ligeramente más adelantado que él y Tote hace la mediapunta; el Betis pone en escena el 4-2-3-1 de la semana anterior, con Iriney a la derecha de Arzu (luego cambiaron posiciones) y Pereira, Emana y Capi de mediapuntas. Afortunadamente Fernández elige a Nacho de lateral en lugar de cambiar a Nelson de banda.
Primera parte
Analizaremos separadamente el juego del Betis con y sin balón.
Fase ofensiva
El Hércules, que en general tiene más el balón, trata casi siempre de apretar arriba. Juega con la defensa muy adelantada, presiona con las líneas bastante juntas y mete al partido un ritmo físico bastante alto, aunque Tote alivia al Betis porque estorba poco a los mediocentros. Aunque juega casi siempre en campo propio, el Betis logra salir de esa presión y contraatacar gracias a las tres novedades que ha traído Víctor Fernández: juego al pie desde atrás (incluido el portero) con los defensas muy concentrados en tener un buen manejo de pelota; un ritmo alto de circulación de balón; y constantes permutas y desmarques de los cuatro hombres de arriba. El Betis juega casi a la contra, obligado por la posición del rival, pero llega arriba y encuentra el gol.
Fase defensiva
Los cuatro jugadores más adelantados comienzan la jugada defensiva en el lugar en que acabaron la ofensiva, de modo que, por ejemplo, muchas veces Emana defiende como extremo y Capi en el centro. El mediapunta aprieta a Farinós, los mediocentros, paralelos y muy activos, aprietan a Tote y Tiago, los laterales cierran bien y el Hércules llega pocas veces con comodidad al área, aunque a medida que pasan los minutos la presión bética afloja y el peligro acecha. La defensa no juega muy adelantada pero mantiene bien posiciones.
Segunda parte hasta el gol del Hércules
Como sucediese ante el Córdoba, el Betis no puede mantener el ritmo físico de la primera parte. Los mediapuntas pierden fuelle. Los centrales dejan de abrirse para pedir la pelota al portero y se abusa del patadón. Perdido el balón, el Hércules gana progresivamente metros y posesión sin respuesta bética, hasta que llega el empate.
Segunda parte a partir del gol del Hércules
El Betis cada vez recuerda más al de Tapia, sin reacción ni física ni, lo que es peor, psicológica. Los mediapuntas y el delantero están asfixiados y sólo Emana aguanta, no por resistencia sino porque había jugado muy cómodo; además y pese a lo trabajado durante la semana ("a más cansancio, más orden") pierden la posición y el mediocampo hace aguas. El cambio de Juanma por Pereira es de cromos, pero la entrada de Pavone sí obliga a Sergio a tirarse a la banda derecha, donde no sigue al lateral y abandona a Nelson a una sucesión de dos contra uno hasta la respectiva llegada de los auxilios de Arzu. Por suerte, el Hércules se conforma con el resultado y el partido languidece, con un ritmo cada vez más bajo. La entrada de Caffa, con vuelta de Juanma a la derecha, demuestra experimentalmente que García era un lastre para el equipo y al menos al final se empuja y se ronda el área rival.
Jugador por jugador
Goitia: Otra vez hizo una parada casi milagrosa. Ha mejorado en las salidas a balones cruzados a su espalda. El gol pareció parable si hubiese atacado el balón con una sola mano, aunque no se le puede culpar de error.
Nelson: Está rápido y parece que va comprendiendo sus responsabilidades defensivas, que es lo más importante de su trabajo. Sacó bien el balón, aunque arriba amaga más que da.
Melli: Bien en el corte y en el manejo de balón, pero con el paso de los minutos pidió cada vez menos la bola a Goitia y la falta de posesión acabó saliendo cara. Tal vez deba empujar la línea algo más arriba.
Carlos García: Muy correcto en colocación, valen las mismas palabras que para Melli.
Nacho: Buen partido. Apretó menos que Vega pero subió mejor.
Iriney: Espeso con el balón en los pies, bien en defensa.
Arzu: Bien; mejoró mucho en presencia respecto a la semana anterior.
Pereira: Tiene verticalidad y técnica, pero le faltó instinto asesino en varias jugadas en el área.
Emana: Indolente y desconcentrado, no eligió bien la jugada. Fuera de tiempo fue expulsado de manera absurda.
Capi: No está rápido y no resiste más de sesenta minutos; aún así, a poco que suba su nivel físico será importante para el juego de Fernández.
Sergio García: Un gol afortunado, cierto manejo de pelota y poco más. Sigue buscando tiros sin sentido desde fuera del área. Estaba cansado cuando jugó de extremo, pero eso no excusa su ventajista actitud de abandonar a su lateral y emparejarse con un central rival para hacer el paripé de que defiende.
Juanma: Una delicia para la afición rival: maneja bien la bola y no crea el menor peligro. Diez minutos después de salir estaba pidiendo agua.
Pavone: Tuvo poco tiempo para demostrar nada, y no lo hizo.
Caffa: En sus nueve minutos el equipo volvió a intentarlo. A balón parado debe sacarlo todo.
REAL BETIS (1): Goitia; Nelson, Melli, Nano, Nacho; Iriney, Arzu; Jonathan Pereira (Juanma, 53), Emana, Capi (Pavone, 68); y Sergio García (Caffa, 85).
HÉRCULES CF (1): Calatayud; Juanra, Abraham Paz, Sergio Rodríguez, Dani Bautista; Farinós, Tiago Gomes; Rufete (Kiko Femenía, 56), Tote (Cristian, 73), Sendoa (Del Olmo, 58); y Portillo.
Goles: 1-0: Min. 24, Sergio García. 1-1: Min. 61, Farinós.
Árbitro: Francisco Ramón Hevia Obras, castellano-leonés. Amonestó a Sergio Rodríguez. Expulsó a Abraham Paz (min. 93) y a Emana (a partido acabado), ambos con roja directa. Amonestó al local Pavone y a los visitantes Sergio Rodríguez, Tiago, Del Olmo, Abraham Paz y Tote.
El Betis ha dejado escapar hoy buena parte de sus pocas posibilidades de ascenso al empatar en un aceptable partido ante el Hércules. El encuentro, especialmente en la primera parte, ha tenido calidad técnica y ritmo alto, aunque con el paso de los minutos se ha ido desinflando por el bajón físico del Betis y el conformismo del Hércules.
El Hércules se presenta inicialmente con un 4-2-3-1 escalonado, en el que Farinós hace de mediocentro y chico para todo (sólo le faltó rematar los córneres que sacaba), Tiago juega ligeramente más adelantado que él y Tote hace la mediapunta; el Betis pone en escena el 4-2-3-1 de la semana anterior, con Iriney a la derecha de Arzu (luego cambiaron posiciones) y Pereira, Emana y Capi de mediapuntas. Afortunadamente Fernández elige a Nacho de lateral en lugar de cambiar a Nelson de banda.
Primera parte
Analizaremos separadamente el juego del Betis con y sin balón.
Fase ofensiva
El Hércules, que en general tiene más el balón, trata casi siempre de apretar arriba. Juega con la defensa muy adelantada, presiona con las líneas bastante juntas y mete al partido un ritmo físico bastante alto, aunque Tote alivia al Betis porque estorba poco a los mediocentros. Aunque juega casi siempre en campo propio, el Betis logra salir de esa presión y contraatacar gracias a las tres novedades que ha traído Víctor Fernández: juego al pie desde atrás (incluido el portero) con los defensas muy concentrados en tener un buen manejo de pelota; un ritmo alto de circulación de balón; y constantes permutas y desmarques de los cuatro hombres de arriba. El Betis juega casi a la contra, obligado por la posición del rival, pero llega arriba y encuentra el gol.
Fase defensiva
Los cuatro jugadores más adelantados comienzan la jugada defensiva en el lugar en que acabaron la ofensiva, de modo que, por ejemplo, muchas veces Emana defiende como extremo y Capi en el centro. El mediapunta aprieta a Farinós, los mediocentros, paralelos y muy activos, aprietan a Tote y Tiago, los laterales cierran bien y el Hércules llega pocas veces con comodidad al área, aunque a medida que pasan los minutos la presión bética afloja y el peligro acecha. La defensa no juega muy adelantada pero mantiene bien posiciones.
Segunda parte hasta el gol del Hércules
Como sucediese ante el Córdoba, el Betis no puede mantener el ritmo físico de la primera parte. Los mediapuntas pierden fuelle. Los centrales dejan de abrirse para pedir la pelota al portero y se abusa del patadón. Perdido el balón, el Hércules gana progresivamente metros y posesión sin respuesta bética, hasta que llega el empate.
Segunda parte a partir del gol del Hércules
El Betis cada vez recuerda más al de Tapia, sin reacción ni física ni, lo que es peor, psicológica. Los mediapuntas y el delantero están asfixiados y sólo Emana aguanta, no por resistencia sino porque había jugado muy cómodo; además y pese a lo trabajado durante la semana ("a más cansancio, más orden") pierden la posición y el mediocampo hace aguas. El cambio de Juanma por Pereira es de cromos, pero la entrada de Pavone sí obliga a Sergio a tirarse a la banda derecha, donde no sigue al lateral y abandona a Nelson a una sucesión de dos contra uno hasta la respectiva llegada de los auxilios de Arzu. Por suerte, el Hércules se conforma con el resultado y el partido languidece, con un ritmo cada vez más bajo. La entrada de Caffa, con vuelta de Juanma a la derecha, demuestra experimentalmente que García era un lastre para el equipo y al menos al final se empuja y se ronda el área rival.
Jugador por jugador
Goitia: Otra vez hizo una parada casi milagrosa. Ha mejorado en las salidas a balones cruzados a su espalda. El gol pareció parable si hubiese atacado el balón con una sola mano, aunque no se le puede culpar de error.
Nelson: Está rápido y parece que va comprendiendo sus responsabilidades defensivas, que es lo más importante de su trabajo. Sacó bien el balón, aunque arriba amaga más que da.
Melli: Bien en el corte y en el manejo de balón, pero con el paso de los minutos pidió cada vez menos la bola a Goitia y la falta de posesión acabó saliendo cara. Tal vez deba empujar la línea algo más arriba.
Carlos García: Muy correcto en colocación, valen las mismas palabras que para Melli.
Nacho: Buen partido. Apretó menos que Vega pero subió mejor.
Iriney: Espeso con el balón en los pies, bien en defensa.
Arzu: Bien; mejoró mucho en presencia respecto a la semana anterior.
Pereira: Tiene verticalidad y técnica, pero le faltó instinto asesino en varias jugadas en el área.
Emana: Indolente y desconcentrado, no eligió bien la jugada. Fuera de tiempo fue expulsado de manera absurda.
Capi: No está rápido y no resiste más de sesenta minutos; aún así, a poco que suba su nivel físico será importante para el juego de Fernández.
Sergio García: Un gol afortunado, cierto manejo de pelota y poco más. Sigue buscando tiros sin sentido desde fuera del área. Estaba cansado cuando jugó de extremo, pero eso no excusa su ventajista actitud de abandonar a su lateral y emparejarse con un central rival para hacer el paripé de que defiende.
Juanma: Una delicia para la afición rival: maneja bien la bola y no crea el menor peligro. Diez minutos después de salir estaba pidiendo agua.
Pavone: Tuvo poco tiempo para demostrar nada, y no lo hizo.
Caffa: En sus nueve minutos el equipo volvió a intentarlo. A balón parado debe sacarlo todo.